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Las tradiciones urbanas y rurales se mezclaron en la Fiesta de la Candelaria

religión. Cuarenta mil personas llegaron el lunes 2 al Santuario de Misión Rahue, muchas procedentes del campo. Dos comunidades huilliches le rogaron a la Virgen.

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Con diferentes ofrendas, pero con la misma devoción, cerca de 40 mil feligreses llegaron el lunes 2 hasta el Santuario de Misión Rahue para conmemorar a la Virgen de la Candelaria. La celebración que lleva más de 200 años instaurada en la zona convoca cada año a miles de comerciantes y feligreses que se toman el sector para presentar sus ofrendas, ya sea a través de velas, cánticos, oraciones, peregrinaciones, flores o frutas y así demostrar su devoción a la Virgen que cumple sus peticiones más personales. Como es tradición, integrantes de comunidades huilliches de Laipulli y Purrehuín asistieron a la fiesta vestidos con atuendos tradicionales de la etnia, donde también veneraron a la Virgen. Las misas comenzaron a las 4.30 de la madrugada del lunes, y pese a la tormenta eléctrica, los peregrinos llegaron puntuales y pagaron sus mandas transitando descalzos por los casi 8 kilómetros que hay entre la Iglesia de Lourdes, en Rahue, y el Santuario . La fiesta finalizó a las 22 horas.