La comedia "The Grand Budapest Hotel", del director Wes Anderson, es la inesperada favorita para los premios de la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión (BAFTA, en inglés), mientras que los intérpretes ingleses Eddie Redmayne y Benedict Cumberbatch compiten en la categoría a mejor actor.

La película acerca de un emblemático hotel recibió 11 candidaturas ayer, incluyendo mejor película y mejor director. Ralph Fiennes fue nominado a mejor actor por su papel como el imperturbable conserje del caótico hotel europeo.

Los premios, que son una antesala a los premios Oscar, también reflejaron la tendencia a cuál será la gran favorita por la Academia Norteamericana, esto debido a que "Birdman", la producción más elogiada en los últimos meses y dirigida por Alejandro González Iñarritu, fue nominada en 10 categorías.

Otra película con 10 nominaciones es "The Theory of Everything", de James Marsh, protagonizada por Redmayne como el físico Stephen Hawking.

Michael Keaton, protagonista en la película de Iñarritu y que encarna a un actor que quiere volver a la primera línea del estrellato en los Estados Unidos, también fue nominado en los premios Bafta como mejor actor.

Las candidatas a mejor actriz son Felicity Jones por "The Theory of Everything", Amy Adams por "Big Eyes", Julianne Moore por "Still Alice", Rosamund Pike por "Gone Girl", una de las favoritas también para ganar el Oscar, y Reese Witherspoon por "Wild".

Otras películas que salieron bien paradas fueron "Boyhood", una cinta rodada durante una década por Richard Linklater y también una de las candidatas para ganar el Oscar a mejor película, y el drama de Damien Chazelle "Whiplash", que trata sobre estudiante de baterista que recibe duros castigos de su histérico profesor, con cinco candidaturas cada una.

Por otro lado, Jake Gyllenhaal fue nominado por su papel de periodista ruin en "Nightcrawler", dejando de lado la mención para Timothy Spall, cuya interpretación como el artista J.M.W. Turner en "Mr. Turner" le valió el premio a mejor actor en Cannes.

Las competidoras al premio a mejor película son "Birdman", "Boyhood", "The Grand Budapest Hotel", "The Imitation Game" y "The Theory of Everything".

Dentro de las diversas celebraciones realizadas en todo el mundo para recordar el natalicio número 80 del cantante y baladista Elvis Presley, en Graceland, la mansión de la cual el "Rey del Rock and Roll" fue propietario, se llevó a cabo un remate que reunió a cientos de fanáticos de todo el mundo.

Distintos artículos pertenecientes al músico fueron rematados, entre ellos la primera licencia de conducir de Presley, una chaqueta que ocupó en la película "Viva Las Vegas", una copia autografiada por el cantante de la canción "That's all right"', y un reloj personalizado que era parte de la colección personal del artista.

Pero sin duda la venta que más acaparó la atención fue la subasta de la primera copia que grabó Elvis en los estudios "Sun Records" a cargo del histórico productor del cantante, Sam Philips.

Una balada llamada "My Hapiness" que se grabó en el año 1953 cuando "El Rey" apenas tenía 18 años.

El costo de grabación fue de cuatro dólares y una vez finalizado el registro, el cantante fue a escuchar el tema a la casa de su amigo Ed Leek debido a que su familia no tenía un tocadiscos.

Con el tiempo el cantante dejó abandonada esa grabación, regalándosela finalmente a su sobrina, que contacto al personal de Graceland para que se realizara la subasta de la copia.

Cientos de seguidores de Presley acudieron a este remate en particular, que comenzó con un precio inicial de 50 mil dólares.

Para sorpresa de los organizadores, las ofertas estuvieron sobre las expectativas, cerrando la subasta con un precio récord de 300 mil dólares, algo así como 160 millones de pesos, a un solo comprador que prefirió mantener su nombre en reserva.

Aparte de la subasta, los fans que acudieron a celebrar su natalicio en Graceland, se reunieron con la familia del cantante para cortar una Torta de ocho niveles que fue preparada especialmente para las personas que acudieron a su mansión en el estado de Memphis, Estados Unidos.