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En perfectas condiciones y esperando el alta médica se encuentra el primer osornino que nació en el minuto uno del 2015. Vicente Eduardo Barría Camino pesó 3 kilos 985 gramos y midió 51 centímetros. Sus padres esperaban que el recién nacido llegara antes, pues su mamá estuvo con trabajo de parto por más de ocho horas.
"Ayer (miércoles) llegamos como a las 11 de la mañana y yo pensaba que iba a demorar poco, pero esperó hasta el otro año", dijo con orgullo y emoción Nicole Camino, al referirse al nacimiento de su segundo hijo Vicente, quien se convirtió en el primer osornino nacido este 2015.
Según cuenta la joven de 21 años, la fecha de parto estaba prevista para el 24 de diciembre, sin embargo se atrasó y ayer comenzó con molestias que la obligaron a trasladarse al Hospital Base de Osorno, donde finalmente dio a luz.
"Estuve todo el día en trabajo de parto y cuando entramos al pabellón como a las 23:50 estaban todos pendientes de mi", agregó Nicole, mientras sostenía al pequeño Vicente en sus brazos ayer en la tarde.
la familia
Pese a que su pareja Javier Barría no alcanzó a llegar al momento del nacimiento, pudo pasar la primera noche con ellos para luego retirarse a celebrar el doble acontecimiento.
La pareja vive en el sector de Rahue Alto junto a la familia de ella y su hijo mayor Sebastián, quien tiene 2 años y medio; sin embargo, buscan cambiarse a otra casa y poder darle mayor comodidad a su familia.
En marzo fueron beneficiados por el subsidio de arriendo que otorga un monto a las familias jóvenes vulnerables y emergentes que quieran independizarse, por lo que ahora más que nunca buscarán un nuevo lugar donde vivir.
"Ahora que llegó Vicente somos cuatro, así que tenemos que buscar sí o sí algo donde estar más cómodos. Por suerte mi marido pidió sus vacaciones ahora y con las tres semanas de postnatal va a poder acompañarme el primer mes, mientras buscamos algo", indicó Nicole.
Vicente
Si bien todos los recién nacidos duermen mucho, la mamá del primer osornino del 2015 asegura que es muy comilón y tranquilo.
"No ha llorado mucho, pero es bien bueno para tomar leche", confirmó.
Durante su embarazo se atendió en el Centro de Salud Familiar de Rahue Alto y tuvo antojos de comer muchas frutillas y sandía, incluso antes de la temporada.
"Fue difícil encontrar las sandías, pero ahora que llegan más voy a poder comer y disfrutar con mi hijo", señaló.