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Escuelas especiales temen cierres pues dicen no estar considerados en reforma

educación. Sostenedores y directores argumentan que de no contar con subvención preferencial, los colegios no podrían funcionar por su alto costo y baja matrícula; además, no cuentan con los recursos para adquirir los recintos que arriendan.

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"De la forma que se ha planteado la reforma educacional, nosotros no estamos considerados y así como está no podríamos continuar. Hay muchas exigencias y requerimientos que no vamos a poder cumplir".

Las palabras corresponden a María Alicia Reyes, sostenedora y educadora diferencial del Taller Laboral Ríe, ubicado en avenida Manuel Rodríguez, quien ve con escepticismo la puesta en marcha del nuevo cambio en el sistema educacional que quiere llevar a cabo el Gobierno.

Su preocupación la comparte con María Anet Meyer, representante y directora de dicho recinto, y se origina en el hecho que dentro de las exigencias que contempla el proyecto de ley, las corporaciones o fundaciones deberán adquirir los recintos que actualmente arriendan.

Ello lo podrán lograr a través de un crédito bancario, o la adquisición de la propiedad con cargo a la subvención en base al avalúo fiscal del inmueble.

"Nosotros hemos invertido varios millones en la adecuación del recinto: renovamos y adaptamos baños y cocinas, además de las salas y ese valor no tiene que ver con el avalúo fiscal", precisó la sostenedora.

sin solución

"Trabajamos nueve educadoras, tres técnicos, un chef y un auxiliar de servicio. Además de los gastos de funcionamiento, el arriendo y todo eso debemos costearlo con la asistencia promedio, que es variable", explicó la sostenedora.

Por lo mismo, tanto sostenedores como directores indicaron que de no continuar recibiendo una subvención preferencial, es casi imposible funcionar debido a los altos costos que se originan por la mantención y que no se suplirían con un eventual ingreso por matrícula, ya que la cantidad de alumnos es baja.

Con un poco más de precaución en cuanto al cierre de la Escuela Taller, pero con las mismas incertidumbres, Juan Reyes, representante de la Escuela Para Autistas Bernard Rimland del sector Los Notros, dice que "creo que es imposible que las escuelas especiales desaparezcan, sin embargo es difícil saber qué va a pasar con los recintos que tienen poca matrícula y no cuentan con un lugar donde permanecer".

En su caso, el recinto donde educan a los 22 alumnos del plantel fue entregado en comodato por el municipio; además, la sociedad que lo conforma, está integrada por los padres de los mismos alumnos.

"Entiendo que en otros casos la situación pueda ser compleja, pero creo que antes de tomar medidas que puedan afectar el futuro de las escuelas especiales, es necesario hacer fiscalizaciones y saber cuáles son las organizaciones que están haciendo bien el trabajo", remarcó Reyes.

En ese punto coincide con la directora y sostenedora del Taller Laboral, ya que según cuentan, son cerca de cinco las escuelas especiales que se dedican a la integración de jóvenes al mundo laboral en Osorno y que en general hacen un buen trabajo.

"Nosotros atendemos a los jóvenes y adultos que tienen necesidades especiales permanentes y que deben aprender a valerse por sí mismos. Hay algunos que lo hacemos bien y otros que deben ser fiscalizados para continuar", dijo la profesora.

El seremi de Educación, Pablo Baeza, precisó que la situación de las escuelas especiales es abordada de la misma forma que cualquier establecimiento particular subvencionado.

"Respecto del proyecto de ley actualmente en discusión, el fin del copago abarca a todas las escuelas que se rigen por la Ley de Subvenciones, dentro de las que están las escuelas especiales y aquellas con proyectos de integración (PIE). Estas escuelas tendrán un plazo inicialmente de 10 años para continuar en el régimen de financiamiento compartido si así lo deciden", aseguró Baeza.

Marcela Mansilla, directora de la Escuela de Lenguaje Paihuén y Samantha Edwards de la Escuela Especial de Lenguaje Comunica, también están preocupadas por el futuro de sus planteles, ya que aseguran que la cantidad de personas que trabajan en los establecimientos (profesoras, médicos, fonoaudiólogos, parvularias, entre otros profesionales) hacen imposible el lucro en este tipo de recintos y aún más la posibilidad de comprar un inmueble que arriendan por $300 mil, pero que en precio comercial supera los $70 millones sólo en infraestructura.

Colegio de Profesores llama a no enviar a los alumnos a clases por 48 horas

movilización. El paro de actividades de los docentes comienza hoy y se extenderá inicialmente hasta mañana. El gremio estudia la continuidad indefinida.
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Un llamado a no enviar a sus hijos a los establecimientos para las jornadas de hoy y mañana, realizó la vicepresidenta del Colegio de Profesores de Osorno, Elba Vargas, a los apoderados de la zona.

Bajo el lema "Sin profesores no hay reforma" el gremio anunció un paro de 48 horas durante hoy y mañana jueves, como una medida de advertencia de una paralización indefinida ante la nula respuesta que tienen de parte del Gobierno respecto del petitorio presentado por el gremio en la Agenda Corta.

Elba Vargas, vicepresidenta del Magisterio, manifestó que "la paciencia comienza a agotarse en los docentes, que podrían paralizar totalmente sus funciones si es que no se llega a un pronto acuerdo".

Los docentes efectuaron un llamado a los padres a no enviar a sus hijos a los establecimientos durante los días de movilización y a sumarse a la marcha que se iniciará a las afueras del recinto colegiado a las 11 de la mañana, la cual recorrerá las principales calles de la ciudad.

La movilización de la semana pasada alcanzó un 92% de adhesión, con 2 mil docentes paralizados, mientras que la marcha convocó a 800 maestros. Las clases perdidas deberán recuperarse en diciembre.