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Grupo de 17 vecinos crea red de ayuda social en pasajes de la Villa Cautín

rahue alto. La iniciativa formada por Olga Manque, se encarga de acompañar a los adultos mayores al hospital y entrega ayuda a los habitantes del sector, principalmente abarrotes.
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veronica.salgado@australosorno.cl

Canalizan ayuda a los vecinos cesantes, a los adultos mayores, acompañan a los habitantes que han perdido un ser querido e incluso celebran el Día de la Madre o la Navidad en conjunto. Esas actividades son sólo parte de la labor que realizan 17 vecinos de la Villa Cautín denominados "encargados de pasaje", quienes tienen la tarea de preocuparse del bienestar y buena convivencia de las 500 familias que componen la villa del sector Rahue Alto norte.

Por una buena causa

Yohana Riquelme es dueña de casa hace cinco años y vive en el sector junto a su marido Mauricio y sus hijos Jonathan de 11 años y Maritza de cuatro. Y desde hace un tiempo es la encargada del pasaje Popoen, donde vive junto a 42 familias más.

Recuerda que cuando la invitaron a ser parte del equipo de trabajo de la junta de vecinos como encargada de pasaje, aceptó de inmediato.

"Es una manera de apoyarnos entre todos, hacemos una labor social muy bonita. Es sorprendente la realidad de cada hogar. Nosotros sólo buscamos ayudar de forma silenciosa, porque el secreto de estos tres años de éxito es nunca abrir la boca para contar la intimidad de los vecinos", dijo la encargada de pasaje.

Recuerda que la primera vez que se presentó con los vecinos fue durante una colecta para apoyar a uno de los residentes que había perdido a un ser querido. En esa ocasión recibió el apoyo de casi todos sus habitantes.

"Hemos creado una relación muy afiatada donde el apoyo y la canalización de ayuda es fundamental", comenta. Sin embargo, cuando ven que se trata de un problema que escapa de sus manos, de inmediato llaman a la presidenta del vecindario para que resuelva el problema.

Enzo Mora es director del grupo Scout Antumapú, quien trabaja con niños y jóvenes de la villa pero además es el encargado del pasaje Nueva Imperial, donde entrega su apoyo a 30 familias.

Confiesa que destinar gran parte de su tiempo al trabajo social en la villa es gratificante, "es como tener una gran familia", comenta.

"Todos nos conocemos y eso nos permite cuidarnos, cuando ingresan personas desconocidas sabemos altiro. Recepcionamos muchos problemas de forma silenciosa y la ayuda también va en la misma línea, es un pacto entre los vecinos", explicó Mora.

Dentro de las principales personas beneficiadas por la labor de los encargados de pasaje está un grupo de al menos 40 adultos mayores que vive en el sector. El encargado cuyo pasaje tiene una persona de edad se preocupa de visitarlo e incluso acompañarlo hasta el hospital o consultorio si es necesario.

Yajaira Guarda comparte con Verónica Saldivia y Verónica Pérez la labor de acompañar a las 80 familias del pasaje Pufallo. Las visitas normalmente las realizan pasadas las 21 horas y el único problema, explicaron, es el tiempo que demoran en cada hogar, porque siempre existen motivos para conversar y compartir una taza de café.

Una vez al mes

Olga Manque, presidenta de la junta de vecinos, explicó que la ayuda entregada por los encargados de pasaje ha sido fundamental para tener un barrio unido, seguro y donde el apoyo es entregada a quienes lo necesitan.

Una de las claves de este exitoso programa social fue la elección de sus 17 colaboradores, que ella misma escogió.

"La principal cualidad que deben tener es empatía y carisma, porque trabajar con gente es una labor compleja y es fundamental brindar confianza", aseguró.

En los tres años de funcionamiento, ha detectado que lo que más necesita la gente es alimentación, por lo mismo, realizan colectas para tener canastas familiares disponibles en caso de emergencia.

De la entrega de alimentos y otras ayudas se lleva un completo registro, tanto de los productos que son otorgados a los encargados de pasajes como a las personas que reciben el apoyo.

"No sale nada desde nuestras bodegas sin firma y realizamos un seguimiento para ver que los vecinos no requieran más apoyo", dijo la dirigente.

Cuando los recursos no alcanzan, recurren a los departamentos municipales para solicitar la ayuda social respectiva.

Esa imagen que han conseguido ante las autoridades comunales les han permitido conseguir importantes beneficios para su comunidad.

Navidad para todos

Con ese dinero compran regalos para los niños que no fueron incluidos en la lista de regalos entregados por el municipio. También organizan una once con helados, jugos y todo tipo de golosinas.

Una labor de servicio que los 17 "encargados de pasajes" esperan seguir desempeñando por mucho tiempo más a lo que ellos llaman "rol de buenos vecinos".