"Quiero darle a los corredores lo que yo no tuve en mi carrera. Viví las falencias que tenemos como deporte chileno y mi intención es trabajar para mejorar lo que hay. Sé que es difícil; sé que hay paradigmas muy difíciles de quitar. Pero hay que intentarlo. Y acepté porque sentía que podía colaborar desde este puesto".
Jorge Mandrú, esquiador osornino presente en dos Juegos Olímpicos de Invierno y uno de los mejores deportistas en la historia de nuestra ciudad, integra desde hace algunos meses la directiva de la Federación de Esquí de Chile. Además, tiene el cargo específico de director de nuevas disciplinas, donde busca promover y desarrollar las ramas del deporte blanco menos conocidas, como el ski cross, entre otros.
Ingeniero civil industrial, trabaja en dos proyectos totalmente alejados del deporte. Vive en Santiago, aunque reconoce su intención de en un futuro no tan lejano volver a Osorno. Y tuvo una experiencia inolvidable como entrenador junto a la talentosa Stephanie Joffroy, en los Juegos Olímpicos de Invierno Sochi 2014, en Rusia.
Ahí se dio cuenta de que las disciplinas de free style tienen más opciones para Chile de entregar medallas. "En el esquí tradicional o alpino, estamos a años luz de las potencias. Aquí, en cambio, se equilibra más la balanza", sostuvo Mandrú, quien se retiró de las competencias el año 2011 y se integró al Club Valle Nevado para crear la primera rama de ski cross en Sudamérica.
JUEGOS OLÍMPICOS
Dentro de esas competencias fue 11° en una Copa del Mundo pero unas pocas semanas antes del evento, no había claridad si había clasificado. "Clasificó en el último lugar, el 32. Fue una alegría tremenda", recuerda.
En la competencia, tras pasar la primera ronda, iba segunda y a punto de pasar a la final, en lo que habría sido la mejor actuación de la historia de Chile en los Juegos Olímpicos de Invierno, cuando se cayó y terminó en el 16° casillero de la clasificación general. "Demostramos que se podía. De hecho se la jugó por terminar primera y por eso se cayó. Eso me gustó, porque cuando yo fui a los Juegos iba a participar; ella fue a competir".
Luego de eso, Mandrú decidió no seguir como DT y establecerse. "Imagínate que me casé en septiembre del año pasado y después de un mes me fui cinco a entrenar y competir a Europa con Stephanie", explicó.
Este año le llegó la invitación para integrarse al directorio y aceptó por la proyección de las nuevas disciplinas. "Eso me entusiasma. A mí me mueve la pasión, no las lucas. Hacer las cosas bien por el deporte chileno. Siento que en el free style estamos creando camino, creando las bases de cómo organizarnos, hay más libertad, una energía súper potente. En el esquí alpino no, porque es una estructura que lleva trabajando más tiempo", expresó el deportista.
Agregó que el ski cross fue, tras la prueba de Descenso, la que tuvo mejor rating en las Olimpiadas. "Llama harto la atención, porque van cuatro competidores al mismo tiempo. Hasta visualmente es bien llamativo".
Finalmente tuvo palabras para Antillanca y el esquí de la zona sur. "Siempre Antillanca ha sido cuna de buenos esquiadores y hoy por hoy hay harto potencial. Por lo mismo, cuando armamos el TNT Tour, mi prioridad era que se corriera allá también, para potenciar las regiones", culminó.