Estacionamientos que carecen de baños y pavimento funcionan pese a ser clausurados
ordenanza. Los dos recintos ubicados en pleno centro de la ciudad fueron cerrados por el municipio, ya que su patente provisoria había caducado en mayo.
Dos estacionamientos del centro de la ciudad continúan funcionando actualmente pese a que fueron clausurados recientemente por el municipio local debido a que no cumplieron con la ordenanza que los obliga a contar con pavimentación, barrera de acceso, baños, entre otras exigencias.
Las normas entraron en vigencia el 31 de abril pasado, por lo que el Departamento de Inspecciones acudió a los recintos para fiscalizar su cumplimiento. No obstante, constataron que éstas no se habían llevado a cabo en los dos lugares ubicados en calle Ramírez y avenida Mackenna.
Según los permisos de circulación solicitados hasta 2012, el parque automotriz en Osorno supera los 35 mil vehículos. Y aunque muchos de ellos no necesariamente se quedan en la ciudad, indiscutiblemente los 22 estacionamientos autorizados para este rubro son insuficientes y desde el año pasado deben cumplir con la exigencia municipal que asegura su buen funcionamiento.
Desde la promulgación del reglamento, los particulares que deseen comenzar un nuevo negocio de estacionamientos tienen un año a partir de la aprobación de su patente provisoria para efectuar los cambios que exige la normativa. 'Ellos deben tener una patente y cumplir con exigencias', según explicó la administradora municipal, Karla Benavides.
Esto fue precisamente lo que no sucedió con las playas de estacionamiento que fueron clausuradas en el sector céntrico.
Entre las normas que contiene la ordenanza para el uso de recintos como playas de estacionamiento se específica que los accesos, salidas y áreas destinadas para los automóviles deben estar debidamente pavimentadas, de modo que se garantice la durabilidad en el tiempo; a ello se suma la demarcación con pintura de cada espacio que se utilizará para estacionar un vehículo.
Asimismo, deben resguardar a sus trabajadores con ropa y calzado de trabajo, identificación, servicios higiénicos para ellos, para quienes será imprescindible que cuenten con licencia de conducir vigente, según detalló Erwin Tripayán, del Departamento de Obras.
La administradora municipal dijo que pese al cierre, los comerciantes prefieren seguir funcionado y arriesgarse a multas de alrededor de 200 mil pesos. Por ello, su rol es continuar con las fiscalizaciones y exigencias especificadas en la ordenanza.
'Es nuestra responsabilidad como municipio velar porque la normativa se cumpla y que los vecinos accedan a un servicio digno', indicó Benavides.
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