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Descendientes de alemanes disfrutaron el triunfo con asado de cerdo y pantalla gigante

fútbol. Simpatizantes germanos se reunieron en el Club Alemán de Osorno para ver la final ante Argentina. Con comidas típicas y mucha camaradería disfrutaron de un duelo intenso y una victoria histórica.

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Fue casi sorpresivo, porque la veintena de osorninos descendientes de germanos que se reunieron ayer en el Club Alemán, en calle O'Higgins, para disfrutar de la final del Mundial Brasil 2014 entre la escuadra europea y la selección argentina, ya se alistaban para los temidos penales.

Pero el gol de Mario Götze a los 113 minutos, en el segundo tiempo suplementario del compromiso de ayer, sacó de improviso los gritos, abrazos y celebraciones. Con un ambiente de mucha camaradería y buen humor y una pantalla gigante en pleno quincho, los socios y simpatizantes del Club Alemán vibraron con el triunfo que le entregó a la nación europea su cuarto título planetario.

'Claro que estábamos nerviosos porque los argentinos, como tienen mucha suerte, podían ganar en los penales. Y la idea era que Alemania gane antes de llegar a esa instancia, porque lo merecía', comentaba un eufórico Carlos Kyling, enfundado con una polera que recordaba el torneo mundial de 2006, precisamente en Alemania y donde el cuadro blanco debió conformarse con el tercer lugar.

Ahora, tras una espera de 24 años (fue monarca en 1990, venciendo justamente a Argentina), el cuadro germano volvió a celebrar y los hinchas de dicha selección de nuestra ciudad celebraron el triunfo como propio. Aunque, eso sí, señalando que si los trasandinos lograban la corona 'también es positivo, por Sudamérica'.

La fiesta comenzó temprano en el Club Alemán de Osorno, con comida típica alemana y la emoción propia de vivir una final entre amigos.

Con un asado de cerdo al palo en un 'pancho' eléctrico y con otras delicias para el almuerzo como chucrut y puré de manzana, así como un alpenkräuter (licor a base de hierbas) como bajativo además de cerveza germana, el duelo se vivió intensamente.

'Le tenemos confianza a la selección alemana, porque ha mostrado un mejor juego en equipo durante todo el torneo. Eso sí, Argentina es un digno rival y tiene jugadores peligrosos', comentaba antes del inicio del cotejo el director del Club Alemán, Ernesto Aubel Mohr.

Tras un inicio con algo de nervios, hubo silencio total en el minuto 20, cuando tras un error en la defensa alemana, Higuaín desperdició un mano a mano con Neuer.

También hubo suspiros de alivio cuando se anuló el tanto trasandino, nuevamente de Higuaín a los 29 minutos. Y cuando se cerraba la etapa inicial, hasta vasos se cayeron al ver el palo de Benedikt Howedes que podría haber sido el 1-0. Así se fueron al descanso. Pero también hubo aplausos de reconocimiento. Con gritos de '¡Grande!', los osorninos despidieron a Klose cuando fue sustituido a los 86'. El máximo goleador de las citas planetarias (16 dianas) se lo merecía.

'Ha sido un partido parejo hasta ahora. Sólo espero que Alemania pueda ganar el partido en el suplementario, porque tiene un mejor plantel. ¿Si llega mejor físicamente? No creo, pienso que están parejos', opinaba Carlos Nusser tras los 90 minutos.

Ya en el tiempo suplementario, los simpatizantes alemanes continuaron sufriendo, porque aunque veían el dominio de los europeos, no había claridad al momento de definir. Y, por el otro lado, cada contragolpe trasandino hacía sufrir. La pantalla gigante dominada todos los rincones del quincho del Club Alemán y los ojos no se despegaban ni un segundo.

Hasta que llegó el momento esperado y el desahogo con el gol de Götze, en una jugada que quedará para la historia. El sonar de las copas de vino se confundía con los aplausos, en una celebración emocionante y a la vez reservada. En un quincho que durante este Mundial se transformó en el 'segundo hogar' para los socios del Club Alemán, ya que se reunieron a ver todos los partidos de Alemania y Chile.

'Alemania fue de menos a más y se vio con mucha fuerza. Nunca se confiaron y eso es importante, por eso ganaron', señalaba sin ocultar su alegría Eduardo Höhnke, quien además indicó que 'Messi es rápido y bueno, pero no se puede comparar con Maradona, que sigue siendo el gran ídolo'.

'Estoy feliz, realmente Alemania se mereció este título, por la campaña que hizo. Fue justo, aunque se sufrió harto'.

'La victoria fue merecida porque se batalló hasta el final. Alemania siempre ha estado peleando el título mundial'.

'Estoy muy contento, pienso que el equipo completo jugó bien y Alemania no dependía tanto de un solo jugador'.

'Hubo siempre un dominio alemán, pero no se concretaba. Y ellos eran peligrosos en el contragolpe. Fue un gran triunfo'.