Los pobladores ocupantes ilegales de las ampliaciones de las poblaciones '11 de septiembre' y 'Carlos Condell', que serán utilizadas para el proyecto de radicación definitivas de jefes de hogar de esos sectores, aceptaron ser llevados a un nuevo sitio ubicado al sur de su actual ubicación, en Rahue Alto.
Durante el reciente Seminario 'Gestando la Infraestructura del Mañana', realizado en el marco de la Semana de la Construcción, dimos a conocer el informe Infraestructura Crítica para el Desarrollo (ICD) elaborado por la Comisión de Infraestructura de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y reconocidos especialistas externos.
El ICD 2014 es un esfuerzo que ha venido realizando nuestro gremio con el propósito de contribuir a las políticas públicas en el área de la infraestructura. Es así que presenta un análisis pormenorizado, identifica fortalezas y debilidades y sistematiza los requerimientos de inversión de ocho sectores prioritarios para el crecimiento del país y el mejoramiento de la calidad de vida de las personas: vialidad y transporte urbano, servicios públicos sociales (hospitales y cárceles), vialidad interurbana, sistema ferroviario, aeropuertos, puertos, recursos hídricos y energía.
Sin embargo, y a diferencia de años anteriores, en esta ocasión el informe se basa en aportes de profesionales externo de gran trayectoria, especialistas en cada uno de los ámbitos abordados, quienes le han dado una nueva densidad al contenido del ICD gracias a su profundo conocimiento experto. Ello ha permitido comparar el estándar nacional con el de otros países, identificar indicadores relevantes para una mejor evaluación y fijar pautas que orienten el desarrollo de cada área.
A través de este estudio, se estima que para que nuestro país mantenga su nivel de competitividad y las personas puedan acceder a servicios de infraestructura acordes a los de un país que se acerca al desarrollo, se deben invertir en esta área US$ 58.000 millones en el periodo 2014-2018. De dicha inversión, el 54% podría provenir de aportes fiscales y el 46% restante del sector privado. Sin embargo, el financiamiento público pudiera ser incluso menor si se potencia el uso del sistema de concesiones.
Esta publicación cobra relevancia si pensamos que para lograr una infraestructura acorde a las necesidades de las personas es necesario que ésta sea planificada con una mirada de largo plazo y considerada como una política de Estado en la cual se debe invertir anualmente alrededor del 5% del PIB nacional, tal como lo hemos sostenido desde hace varios años.Es por esto que hemos entregado este informe a las nuevas autoridades de Gobierno y medios de comunicación con el fin de darlo a conocer en profundidad y pueda servir de guía para la planificación de la futura infraestructura nacional. Continuaremos realizando su difusión, siempre con el espíritu de ser un aporte concreto al desarrollo del país.
Tal como lo habían anunciado, un grupo de estudiantes de la Universidad de Los Lagos se tomó ayer a primera hora las instalaciones de la casa central, ubicadas en calle Cochrane. Así, ni el rector Raúl Aguilar, ni el personal administrativo que allí labora pudieron ingresar a sus respectivos puestos de trabajo.
Con una ceremonia presidida por el obispo de la diócesis, monseñor Alejandro Goic, ayer a las 11 horas se bendijo la nueva capilla de Pucatrihue, perteneciente a la parroquia de Misión San Juan de la Costa. La construcción concluyó recién en esta semana y fue financiada con aportes del exterior y dineros reunidos por la comunidad.
Hace unos días el Comité de Ministros determinó finalmente rechazar el proyecto energético HidroAysén, en una decisión unánime de la comisión encabezada por el titular de Medio Ambiente, Pablo Badenier.
La decisión llegó en momentos en que la discusión energética en el país ha ganado espacios importantes, debido a su escasez proyectada y a los costos de la misma. HidroAysén es el segundo megaproyecto de generación eléctrica más grande en Chile que cae, después del rechazo a la termoeléctrica Castilla, en la región de Atacama.
HidroAysén fue proyectado con una potencia instalada superior a los 2.700 MW, que serían inyectados al Sistema Interconectado Central (SIC), mientras que de Castilla se esperaban 2.100 MW.
Más allá de que los titulares de la hidroeléctrica hoy tengan la posibilidad de apelar a la decisión del Comité de Ministros, el Estado de Chile -no sólo el actual Gobierno- debe seguir avanzando por una agenda energética que sea capaz de cumplir con los requerimientos de un país que consume progresivamente más electricidad. Se estima que hacia el 2020, el consumo eléctrico en Chile aumentará en el orden de los 100 mil gigawatts/hora (GWh) de demanda total. Este imperativo debe respetar el equilibrio ambiental y a la vez, tener en cuenta la relación con las comunidades. No es un desafío menor, pero es posible, en la medida que exista un trabajo con claras determinaciones y la capacidad de asumir nuevas alternativas e invertir en ellas.
Hace unos días, SunEdison inauguró en la Región de Atacama el parque solar más grande de Latinoamérica, capaz de aportar con 100 MW al SIC. Es un volumen menor comparado con lo que una hidroeléctrica o una termoeléctrica pueden generar, pero su impacto al medio ambiente es significativamente menor y los avances en estas tecnologías han ido aumentando su eficiencia. Chile debe saber aprovechar su potencial energético, ser capaz de diversificar y hacer apuestas por las energías sustentables. Mientras la demanda energética en el país sigue aumentando, el desafío para Chile es buscar alternativas que cumplan con los imperativos técnicos, sociales y ambientales.