Problema en las luces es la principal falla de vehículos al realizar la revisión técnica
Leonardo Yevenes
Las estadísticas simplemente no mienten e indican que entre un 30% y 40% de los conductores locales que realiza el trámite de revisión técnica, terminan reprobando y debe volver a revisar su vehículo por segunda vez.
Muchas de estas cifras se sustentan en el descuido que caen los usuarios al no entregarle la suficiente importancia al mantenimiento de sus vehículos, principalmente al sistema de iluminación.
Si bien uno de los exámenes que más evitan los conductores es el análisis de gases, es otro totalmente distinto el que provoca el mayor número de rechazos.
Cristóbal Varela, jefe de planta de PRT -ubicada en calle Alcalde Fuchslocher-, advierte que "la mayoría de quienes traen su vehículo sienten temor de lo que será esta prueba (gases). Piensan que la planta los rechazará y los hará volver, pero la realidad dice que la mayor parte de los automovilistas que son rechazados, es porque se ha descuidado en el tema de sus luces".
La misma apreciación tienen en la planta ubicada en calle Errázuriz, donde Cristian Kahller, asegura que la mayor parte de quienes reprueban la revisión, lo hacen por darle una importancia menor a lo que es el denominado "test visual", es decir, "se descuidan en temas tan sencillos como lo es el desgaste de sus ruedas o en la reposición de sus luces".
Otro dato llamativo tiene relación con el tipo de vehículos que resultan rechazados y que poseen como denominador común la marca o el año.
"Hace cuatro o cinco años atrás, todavía podían verse varios autos de la marca Lada, pero hoy en día es muy extraño que vengan o pasen la revisión técnica; son modelos que presentan muchas fallas y cada vez es más costoso para el usuario mantenerlos en buenas condiciones", agregó Cristian Kahller.
Lo mismo sucede con los vehículos que superan los treinta años de antigüedad y donde la mantención permanente de los mismos, ha hecho que cada vez sean menos los automóviles que se presenten para su revisión.
Por lo mismo, se ha notado una modernización del parque automotriz a nivel nacional, lo que se replica en Osorno.
"Los vehículos y choferes que vienen a renovar su permiso cada vez tiene menos problemas a la hora de pasar una revisión, que en promedio no supera los 20 a 25 minutos entre los tres exámenes obligatorios: visual, de gases y de frenos", sostuvo el encargado de la planta de Errázuriz.
Contrario a lo que se podría pensar, a las plantas no les conviene que los usuarios retornen para realizar el examen de revisión. Esto, debido a los altos costos que se manejan en la mantención de los equipos y maquinarias que se utilizan para realizar las pruebas.
"Cada vez que una máquina realiza una revisión, ésta genera un costo para nosotros, por lo que volver a realizar pruebas a un vehículo que ya canceló el servicio, es poco conveniente. Eso, sin contar que para sostener los estándares de revisión que se nos exigen, se debe realizar una mantención bimensual de las mismas", indicó Varela.
Las fechas preferidas por los usuarios para realizar sus revisiones son los primeros cinco días de cada mes y los últimos diez.