Simples matemáticas: aunque cada triunfo vale lo mismo, lo cierto es que el tercer partido de una llave al mejor de cinco es clave. Más aún cuando los protagonistas llevan a esta instancia igualados 1-1.

Y esa es la situación que vivirá hoy Osorno Básquetbol, cuando en un repleto Gimnasio Monumental "María Gallardo Arismendi" se mida a partir de las 19 horas a Tinguiririca de San Fernando por el duelo 3 de la final de la Liga Nacional Movistar. El choque le permitirá, a cualquiera de los dos, poder definir mañana (mismo horario y recinto) el título de la competencia que logró unificar a la LNB y Dimayor. De terminar igualados, el quinto y definitivo se jugará la próxima semana en la zona central.

La explosiva venta de entradas durante el jueves y viernes permiten adelantar un Monumental repleto. Ayer, al cierre de esta edición, quedaban pocas entradas por vender en los tres puntos donde los hinchas podían adquirir sus boletos (Proanorte, El Refugio y Rodríguez 1931), por lo que ya se aseguraron 2.400 personas por día. A eso se le suman las invitaciones realizadas por el club y, dato importante, las entradas disponibles hoy en el mismo recinto.

"Las puertas del Monumental se abren mañana (hoy) a las 17 horas y allí comenzará la venta de 500 entradas por día. Todas son de adulto (4 mil pesos), ya que se agotaron los abonos y estudiantes entre jueves y viernes", indicó el dirigente Álvaro Barrientos. Así, se esperan cerca de 3.300 personas, aproximadamente, contando a los numerosos niños que entran gratis.

Una respuesta espectacular de una comunidad volcada con un equipo que ha demostrado fortaleza anímica en los peores momentos. Y que alimenta las esperanzas de un equipo que busca entregarle a la ciudad una corona profesional cestera que no celebra desde el 2006.

El plantel de Osorno Básquetbol no ha parado de trabajar tras su regreso de la zona central. De hecho ayer realizó trabajo en doble turno; tras una sesión del jueves donde el DT Juan Manuel Córdoba hizo hincapié en la fluidez ofensiva del equipo. El plantel estará completo para el fin de semana, aunque Rashad Jones-Jennings y Martín Pino complementaron su entrenamiento con trabajo kinésico. No quedó ningún detalle al azar.

En conversación con El Austral, el DT dijo que la clave es mantener lo realizado en el año: "tomar cada partido con la mayor concentración. Podemos ganar o no, pero siempre entregando el máximo. Eso no lo vamos a transar".

Aunque sabe que los partidos serán distintos, "Manu" tomó nota de lo ocurrido en San Fernando. "Fue importante sacar un partido allá; obviamente lo óptimo habría sido sacar los dos, pero sabemos que es una final y que partimos en desventaja ya que ellos tenían la localía, así que el balance es positivo porque tenemos la posibilidad de definir en casa".

Indica que el primer duelo (donde fue expulsado) fue irregular y que aunque se luchó, "no tuvimos la claridad para definirlo a nuestro favor. En el segundo pudimos arreglar los puntos débiles que habíamos mostrado y fuimos claros dominadores, tanto en el juego como en el marcador, en prácticamente todo el partido".

-Ha pasado una semana y cada flanco se analiza con prolijidad. ¿Qué se puede esperar para este fin de semana?

-La serie está abierta y nunca hay dos partidos iguales en un playoff. Sabemos el potencial que ellos tienen y nosotros también sabemos nuestro potencial y lo que tenemos que hacer para quedarnos con el partido del sábado, que es el que nos interesa. Siempre el punto que se viene es el más importante. Vamos partido a partido, con tranquilidad.

-La efervescencia es grande, más aún en una ciudad basquetbolizada como Osorno. ¿Cómo se maneja esa ansiedad?; ¿puede transformarse en presión?

-Hay diferentes personalidades y en el plantel tenemos una mixtura de jugadores experimentados y jóvenes. Pero nuestro planteo ha sido siempre el mismo: enfrentar cada partido como equipo y darle las herramientas al jugador para que pueda realizar lo que el equipo necesita.

-¿Se siente la presión en una instancia así?

-Es una presión sumamente agradable, por el hecho de poder disputar la opción de ser campeón. Hemos tenido presiones negativas, al poder ser eliminados en fases anteriores o empezar con malas rachas. Ahora la presión es de Tinguiririca, que tiene que ganar como visita. Nosotros sabemos que el público está con el equipo, independiente de cómo esté el marcador, ya que hemos demostrado que nos podemos reponer de cualquier situación adversa.

Finalmente, concluyó con una reflexión. "Todos los se preparan para ganar y aquí no hay empates. Pero es diferente que nos ganen a poder sentirnos perdedores porque otro equipo haya hecho más méritos para ganar un juego. Lo vamos a dejar todo. Este equipo se ha ganado al público con su esfuerzo".

Para el plantel, la compenetración que han conseguido en la cancha y la fortaleza mental tras haber pasado por momentos complicados, serán claves para afrontar los duelos del fin de semana. Así lo indicó el juvenil Sergi Salamanca, quien comentó que el equipo llega al duelo de hoy "con sensaciones positivas. Hemos trabajado mucho y sabemos los errores cometidos y la idea es no repetirlos. Con la humildad de siempre y jugando en equipo buscaremos ganar".

Por el lado de Tinguiririca, en tanto, su entrenador Pablo Ares señaló a la Prensa LNB que "tenemos confianza en que podemos mejorar bastante y a lo mejor ir a robar un partido, y por qué no los dos. Trabajaremos para eso, porque la serie no está cerrada". Cabe señalar que en la última etapa del torneo -fase nacional y semifinales- logró marca como visitante de cinco triunfos en nueve presentaciones.

Osorno, en tanto, tiene marca de siete victorias consecutivas jugando en el Gigante de Pilauco.