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Hinchas se reúnen para apoyar al equipo

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Media ahora antes del inicio del partido comenzaron a llegar decenas de hinchas, muchos padres con sus hijos, hasta el local "La Banka de Suplentes", que se ha convertido en el punto de encuentro para los seguidores del equipo de Osorno Básquetbol, cuando juega de visita.

Ayer unos 80 fanáticos se juntaron en este espacio ubicado en calle Prat para alentar al equipo en el primer duelo de la final de la Liga Nacional Movistar ante el conjunto de Tinguiririca, en San Fernando.

El propietario del local, Miguel Villegas, comentó que "los hinchas ya saben que cuando Osorno juega de visita, nosotros vamos a transmitir los partidos y ya se ha hecho una tradición".

Dijo que en el espacio cuentan con cinco pantallas tanto al interior como en la terraza para que el público pueda disfrutar sin problemas de los encuentros.

De hecho los propios jugadores y cuerpo técnico de Osorno Básquetbol saben que cuando juegan de visita, los hinchas en su mayoría se reúnen en este espacios, por lo que envían saludos en las pantallas del Canal del Deporte Olímpico (CDO).

Entre los hinchas que se encontraban en este "sportbar" estaba el joven Manuel Oyarzo, quien comentó que "yo sabía que los hinchas del equipo se reunían acá, así es que quise venir porque me gusta el básquetbol y hay que apoyar a Osorno porque está a un paso de lograr algo histórico. Ojalá pueda salir campeón", sostuvo.

Osorno cae 86-73 en la "caldera" de San Fernando pero la fe sigue intacta

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Con 30 grados de temperatura y una entusiasta barra que lo apoyó de principio a fin tras viajar 800 kilómetros, Osorno Básquetbol cayó por 86-73 ante Tinguiririca San Fernando, en el primer partido de la final de la Liga Nacional de Básquetbol.

El compromiso -jugado en el Gimnasio Marista de la ciudad colchaguina- fue favorable durante gran parte del compromiso para los "energéticos", y sólo en el tercer periodo los Toros pudieron mostrar lo mejor de su juego e incluso estar arriba en el marcador por un punto. Una prueba de que es posible revertir este mal comienzo en el partido que se juega a las 19 horas de hoy, nuevamente en el reducto de la Región de O'Higgins.

El primer cuarto partió con el conductor del local sencillamente intratable. Franco Morales no sólo lideró a su equipo con movilidad y talento, sino también castigó dos veces desde la línea de tres puntos, anunciando una actuación memorable que lo dejó al final con 23 puntos como el mejor anotador y un 100% de efectividad desde la línea de lanzamientos (6-6).

Adicionalmente, Patrick Sáez logró neutralizar a un diezmado Jennings y Osorno no se encontró con su juego bajo la tabla. Así las cosas, el primer periodo terminó con diferencia de 10 puntos en favor del anfitrión.

Por si fuera poco, las malas noticias siguieron cuando el técnico Juan Manuel Córdoba fue expulsado a un minuto del término del periodo, por reiterados reclamos contra los cobros de los árbitros, que -por cierto- dejaron muchas dudas en su desempeño.

El segundo cuarto se inició con más intensidad por parte de los osorninos, que lograron acortar rápidamente la cuenta a cinco puntos (27-22) cuando recién transitaban dos minutos. Sin embargo, el bajo porcentaje de conversión de tiros libres comenzó a ser un factor relevante y de esta forma el visitante perdió la posibilidad de acercarse más. De hecho, Osorno Básquetbol terminó el duelo con un 64% de efectividad por esa vía (21 de 33), muy por debajo del 74% del local (28 de 38).

Con todo, los equipos se fueron al descanso 43-34.

En el inicio del tercer periodo Osorno mostró por qué llegaba con una racha de 14-1 a su favor en los últimos 15 compromisos. Apareció Rodrigo Muñoz -quien a la postre fue la tercera mejor mano del visitante, con 14 puntos- y los americanos Jennings y Morrison ganaron más rebotes.

Así, Osorno llegó a estar 47-48 arriba a 5.30 del final del lapso y 53-54 cuando restaban 3.30.

Sin embargo, un par de pérdidas de balón y malas decisiones a la hora de escoger el momento de lanzar, llevaron a que Tinguiririca recuperara la ventaja y terminara 61-56 el periodo.

El último cuarto fue peleado punto a punto por ambos equipos. Tanto así que cuando restaban 5.30 minutos para el término llegaron a estar 70-69 en ventaja de los locales. Sin embargo, la ansiedad por sumar de tres llevó a Osorno a perder varias posesiones de balón y luego caer en la desesperación. Así, los "energéticos retomaron el control y estiraron la diferencia, que ya a dos minutos del término era de 10 puntos y cerró con el definitivo 86-73.

En todo caso, la sensación en que coincidieron jugadores e hinchas taurinos es que la llave está abierta y es perfectamente posible pensar en un triunfo hoy, a partir de las 19 horas.