Fotografías de David Muñoz Muñoz

A treinta y dos años del fallecimiento del primer obispo de Osorno, monseñor Francisco Valdés Subercaseaux -ocurrido el 4 de enero de 1982-, su memoria y trabajo eclesial y misionero continúa vigente entre miles de fieles e integrantes de diferentes comunidades católicas urbanas y rurales de la zona. Por ello el legado de este siervo de Dios, quien está en proceso de canonización, fue recordado con una misa la noche del lunes en la catedral San Mateo, la que fue oficiada por monseñor René Rebolledo, designado recientemente arzobispo de La Serena. Como una forma de perpetuar y dar a conocer su trabajo, se montó también una exposición con 30 imágenes que recogen la vida familiar, sacerdotal y los más de 25 años como primera autoridad diocesana de Osorno. La muestra permanece abierta en los pasillos de la catedral y forma parte del trabajo de difusión que realiza la Fundación Francisco Valdés, filial Osorno, que dirige el sacerdote Juan Braun de la parroquia San Lepoldo Mandic de Rahue Alto.