Un trabajador fallece tras sufrir un ataque cardíaco mientras jugaba fútbol en San Pablo
deceso. Guillermo González, de 43 años, se desplomó en medio de la cancha, tras lo cual fue trasladado al Cesfam de la villa, donde dejó de existir. Se desempeñaba como peoneta, era casado y padre de un hijo de 25 años.
La tarde de ayer se disputó el Campeonato Oficial de Clausura de San Pablo 2013, donde varios equipos de fútbol competían en diversas categorías desde el viernes 25.
Guillermo González Bustos, de 43 años, era volante de creación e integró durante tres décadas el Deportivo Estrella del Sur, que ayer se enfrentaba en su serie Senior al Club Deportivo Trumao, en el Estadio Municipal de la villa. Eran las 16.10 horas y transcurrían 6 minutos del segundo tiempo del duelo, cuando el futbolista se desplomó en la cancha a raíz de un ataque cardíaco.
El recinto, que se ubica en la calle Tralmahue, no contaba con paramédicos, por lo que sus compañeros de fútbol intentaron reanimarlo a la espera de la ambulancia para trasladarlo al recinto asistencial.
En medio del ejercicio reanimatorio, González despertó y por unos segundos se le vio consciente y moviéndose, pero luego de un rato sufrió una recaída. Esto ocurrió mientras sus amigos y compañeros deportivos esperaban la llegada de la ambulancia que lo trasladaría al Centro de Salud Familiar (Cesfam) de la comuna.
"(El vehículo) se demoró como 20 minutos en llegar", comentó Elvis Aranda, dirigente de Juventud de San Pablo, club deportivo que también participaba en el certamen futbolístico.
Ya en el recinto asistencial, personal médico atendió a Guillermo González, pero a las 17 horas confirmaron su deceso en el área de Urgencia del Centro de Salud Familiar.
repentino
Elvis Aranda se encontraba en la cancha número 2 junto a su equipo y cuando supo del accidente se fue rápidamente al centro de salud.
"Esto fue repentino. Había jugado bien el primer tiempo del partido. Ni siquiera tenía la pelota cuando sufrió el ataque. Cayó al suelo pasados seis minutos en el segundo tiempo", relató sobre el hecho que impactó tanto a los jugadores como al público presente.
El primero en aplicarle los primeros auxilios a González fue un compañero del equipo rival, quien le masajeó el pecho y monitoreó su respiración hasta que llegó la ambulancia.
La emergencia, una vez comunicada a todos los participantes, obligó a suspender el resto de los duelos del campeonato que se jugaban en el estadio municipal. No obstante, los demás partidos que se disputaban en el sector rural de San Pablo no sufrieron modificaciones.
Guillermo González vivía en la calle Los Robles, número K-3, con su esposa Elisa Soto Delgado y un hijo de 25 años, que lleva su mismo nombre.
Trabajaba de forma independiente en una empresa de alimentos de San Pablo como peoneta. Su labor diaria consistía en cargar y descargar pesados sacos en camiones.
"Pero no tenía antecedentes de problemas al corazón. Nunca se había chequeado", detalló Elvis Aranda, quien reunió información a partir de las conversaciones de amigos y familiares, los cuales se juntaron tanto en el Cesfam como en el hogar de González.
Luego de confirmarse en primera instancia que Guillermo González sería velado en la sede social de la comuna, su esposa decidió que el cuerpo se quede en el hogar de la familia, lugar donde fue entregado directamente desde el Cesfam.
"Esto fue repentino. Había jugado bien el primer tiempo del partido. Ni siquiera tenía la pelota cuando sufrió el ataque".
Elvis Aranda
Dirigente Club Deportivo
Juventud de San Pablo