Competitividad estancada
"Resulta evidente que en los últimos doce años nuestro país ha ido perdiendo competitividad"
Recientemente el World Economic Forum entregó el Informe de Competitividad Mundial 2003-2014, en el que evalúa a 148 países. En esta oportunidad, Chile quedó en el lugar 34, un puesto más abajo al obtenido en la medición anterior.
Lo preocupante del resultado es que se trata de la peor ubicación obtenida por nuestro país desde que se comenzó a realizar este estudio, pese a que en América Latina sólo somos superados por Puerto Rico que obtuvo el trigésimo lugar. Es más desde la evaluación correspondiente al período 2002-2003, Chile ha ido cayendo progresivamente en el ranking desde la casilla 22 a la 34 actual.
Resulta evidente entonces, que en los últimos doce años nuestro país ha ido perdiendo competitividad producto de deficiencias ya conocidas de nuestro proceso de desarrollo y que aún no hemos sido capaces de superar.
En lo medular el informe identifica como las principales causas del estancamiento en que estamos sumidos la mala calidad de la educación, la falta de oferta energética y la ineficiencia de nuestro mercado laboral.
En cuanto a la educación, aunque hay avances que se valoran, como la cobertura, de todas maneras seguimos rankeados dentro del 30 por ciento de los países con peores indicadores en esta área. En relación a energía, aquí hay una consecuencia clara del daño que le está haciendo al país la carencia de una política nacional energética de largo plazo, la permanente oposición a los proyectos y la judicialización de las inversiones. Por último, en lo referente al mercado laboral, una de nuestras principales debilidades continúa siendo la aún escasa participación de la mujer en la fuerza de trabajo, ítem en el que Chile aparece en el lugar 106.
Mejorar nuestra competitividad es fundamental para seguir progresando, pues la evidencia empírica demuestra que las economías más competitivas crecen más rápido y le dan mayor bienestar a su población. En consecuencia, una de las grandes tareas que tenemos por delante es superar las precariedades que aún persisten en los rubros descritos y que están obstaculizando nuestro proceso de desarrollo.