Hace un mes, aproximadamente, Gabriel Vallejos recibió una notificación por parte de la Federación Chilena de Boxeo. El mensaje era escueto, pero para ponerse orgulloso: lo nominaban a la selección chilena que competirá en el Campeonato Continental que se desarrollará entre el 29 de agosto y el 5 de septiembre en Santiago y donde participarán 26 selecciones.
"Fue una tremenda alegría, porque uno de mis grandes objetivos a nivel amateur es llegar a los Odesur del próximo año. Y este certamen es precisamente una preparación para este evento. Además, Chile lleva equipo completo, desde los 52 kilos donde estoy yo hasta los 91", comentó Vallejos (22).
Pero por esas mismas fechas comenzó a cursar el segundo semestre de su quinto año de Arquitectura, en la Universidad de Los Lagos, con un calendario extenuante: siete asignaturas.
TRABAJOS
Aunque en un principio no tuvo dudas, con el pasar de los días comenzó a ver su calendario de pruebas y trabajos y tras conversar con sus profesores, esta semana avisó a la Federación que no podrá participar.
"Claro que estoy triste, porque es un torneo internacional, son como unas mini olimpiadas. Hablé con la jefa de carrera y con los profesores y aunque conversamos el tema, hay trabajos grupales a los cuales no puedo faltar. Lamentablemente tuve que colocar mi carrera universitaria contra el deporte", sostuvo el dos veces campeón nacional.
La situación de Vallejos despierta una interrogante común en Chile: ¿es la universidad el cementerio de los deportistas? "Ojalá existiera más flexibilidad y las cosas puedan ser compatibles. Los profesores me escucharon, pero a la vez me decían que tuviera cuidado, porque podía perderme clases importantes. Lamentablemente tuve que priorizar y optar por mi futuro profesional, perdiendo una gran oportunidad a nivel deportivo", indicó.
De hecho, Vallejos comentó que citaciones anteriores habían sido a principios de año o en vacaciones de invierno, "por lo que me podía acomodar mejor. Ahora no fue el caso. Además, cada año se torna más complicado con las clases". Comentó que la asignatura de Taller, una de las más complejas en su carrera, implica trabajos de maquetas grupales, "por lo que obviamente no iba a participar y no me podrían evaluar. No podía dejar a mis compañeros".
Se mantenía entrenando todos los días y los intensificó tras saber de su nominación. Su última pelea amateur fue en mayo, por lo que está ávido de volver al ring. Pero tendrá que esperar hasta, posiblemente, principios de septiembre, donde combatiría en el preliminar de una pelea profesional.
"Fue una decisión súper complicada y mi papá me apoyó harto. Sé que es una opción importante, pero no es la única. Ojalá que esto no me perjudique", comentó.
futuro
Vallejos tiene el temor de que el técnico de la selección y quien lo pidió expresamente para integrar el combinado nacional, Jesús Martínez, pueda considerar su negativa de acudir como falta de interés. Especialmente porque la respuesta afirmativa por parte del púgil osornino fue inmediata y recién esta semana se retractó.
"¿Te digo algo, sinceramente? Creo que igual tengo oportunidades. Porque, claro, este torneo servirá de preparación, pero después me voy a tener que enfrentar al que gane en 52 kilos. Y, sinceramente, soy el mejor de Chile en esa categoría".
Vallejos comentó que el equipo definitivo para los Juegos Odesur se reunirá para una concentración en enero y febrero en el Centro de Alto Rendimiento, "y mi idea es estar en ese grupo, ya que ese será el que llegue a los Juegos Odesur del 2014".
Según su planificación y titulándose de arquitecto el 2014 o a principios de 2015, buscará hacerse profesional en el boxeo. "Es mi próxima meta y para eso me estoy preparando a conciencia. Quiero cumplir mis sueños", finalizó.