"Es una excelente oportunidad para ampliar la oferta exportable de carnes y rentabilizar mejor el ganado nacional"
Christian Arntz, presidente de la
Sago, por acuerdo de Chile con China
"Es fácil ver cómo llegan algunos perros buscando algo de comer y que han sido abandonados"
Augusto Willer, agricultor que perdió animales por perros asilvestrados
"La "cultura parrillera" está inserta en nuestra sociedad desde hace muchos años. Con el tiempo los consumidores han adoptado gustos más refinados y en muchísimos casos, han investigado respecto sobre cómo obtener un producto terminado de calidad superior. Esto ha servido para valorar las carnes mucho más allá de la tipificación clásica (vacuno).
Para satisfacer esta demanda, han surgido en los últimos años las carnicerías boutique, que han hecho un trabajo de mercadotecnia destacando la nobleza de estos productos, y poniendo el énfasis donde debe estar. A ellas acuden clientes autodidactas, pero no menos instruidos, buscando características tan específicas de un conocedor de carnes como cobertura de grasa, razas específicas de ganado y tiempos de maduración. Algo que era impensado hace algunos años.
Esto, sin duda, ha permitido incorporar valor a este segmento de mercado.
Una persona que se atreve a probar una carne premium encontrará un producto (dependiendo el corte) con una cobertura de grasa que puede llegar hasta los tres centímetros, una infiltración de grasa dentro del músculo que permitirá que el sabor esté dentro de la carne y no solamente por fuera, desarrollando características organolépticas superiores frente a otro tipo de vacuno.
Existe gran cantidad de innovaciones que llevan el producto carne al siguiente nivel. Los profesionales de la industria gastronómica han comprendido y se han interiorizado respecto de las posibilidades de preparación de una carne premium, logrando destacar y centrarse en la simpleza del producto, enfocándose en realzar las bondades que poseen.
Es así como braseados de largo tiempo, cocciones sous vide (al vacío y baja T°) o carnes con procesos de mortificación (maduración en seco), han llevado a relevar las bondades en un nivel superior.
Sin embargo, aún tenemos mucho más que innovar y educar. Como Inacap estamos trabajando en alianza con instituciones que se han dedicado a la investigación para entregar formación constante a nuestros estudiantes, de modo que conozcan de las bondades de estos productos que nos obliga a tener un rubro gastronómico cada vez más profesionalizado y con la capacidad de mantenerse a la vanguardia de las tendencias de consumo.
Jorge Ojeda Torres, director de la Escuela de
Hotelería, Turismo y Gastronomía de Inacap Osorno
A mediados de este mes se llamará a licitación pública para realizar el estudio del diseño de la remodelación de la Estación Vieja de Ferrocarriles de calle Bulnes, con su correspondiente entorno, incluyendo la plazuela Fermín Vivaceta. La Dirección de Arquitectura de la municipalidad elaborará las bases de la propuesta pública.
Una providencial escapada tuvieron el empresario agrícola Johannes Epple (47 años) y su hija Javiera, de 21, al capotar el helicóptero en el que viajaban desde Osorno al sector de Puyehue. Luego de 20 minutos de vuelo, el aparato cayó al costado del kilómetro 70 de la Ruta Internacional 215, sector Ñilque.
Un trabajador resultó muerto con arma blanca y otro quedó con heridas leves en el transcurso de una fiesta bailable que tuvo lugar en una sede social en el sector de Ovejería. La víctima, de 33 años, casado, recibió una fulminante estocada en la región abdominal, provocada por uno de los invitados.
Toda ciudad que es sometida a profundas intervenciones viales, naturalmente, se estresa. Acostumbrarse a las restricciones del tránsito por avenidas muy concurridas o calles estratégicas, ajustarse a los feroces tacos por los "hombres trabajando" o habituarse a los desvíos cuando las faenas son para largo, supone un sacrificio para conductores o peatones que, en todo caso, se realiza por un bien mayor, en el entendido que pronto podrán disfrutar de mejoras viales que impactarán en su calidad de vida, gracias a una calzada refaccionada o menores tiempos de viaje. La ciudad de Osorno, en este sentido, lleva varios años sometida a un estrés vial que ha derivado, no obstante, en evidentes mejoras efectuadas en las avenidas Rodríguez y Mackenna, vías ya bastante más seguras y expeditas que antes.
El turno del sacrificio está dado ahora en República, que desde enero de 2018 se encuentra bajo una remodelación que la dejará a la altura del panorama que se observa en Rodríguez y Mackenna, y que ya se puede vislumbrar en el tramo que va desde el puente San Pedro hasta Victoria. Pero como tantas obras de gran magnitud en las ciudades, los trabajos ya están presentando lunares, ejemplificados en a lo menos dos cuadras de veredas de tierra, sin intervención alguna, que abiertamente han perjudicado a los peatones y, sobre todo, a los numerosos comerciantes del sector.
El sinsentido de este contraste, con una moderna avenida y al costado veredas llenas de piedras y barro o agua, según sea la condición climática, estriba en que su origen está en dificultades burocráticas, pues la empresa constructora a cargo de las faenas espera desde el año pasado la entrega de $153 millones adicionales. El Serviu ha realizado las peticiones de esos recursos al Gobierno Regional, y este ha respondido con observaciones, en un tira y afloja al que nadie le pone coto y que tiene a los transeúntes y locatarios de Rahue Bajo sin poder disfrutar como corresponde de una inversión pagada por todos los chilenos.
Mientras permanezcan aquellas veredas de tierra, difícilmente se podrá aplaudir la reconversión de República.