El concepto empleabilidad ha ido evolucionando de la mano al mercado laboral, lo que involucra mucho más que la acción de conseguir un puesto de trabajo o a aspectos vinculados a la movilidad laboral.
El perfil que busca un empleador en la actualidad dista mucho de lo que buscaba hace años atrás, por lo cual nos enfrentamos a escenarios dinámicos, en que es necesario fortalecer las competencias para estar en sintonía con lo que el mercado requiere, y en ello es fundamental sumar valor al grado de empleabilidad que puedan tener los futuros profesionales y técnicos en el proceso de formación académica; entendiendo que existen variables relacionadas al conocimiento puro y otras de índole personales, que se conjugan en las destrezas del postulante a un trabajo.
La empleabilidad entendida como la capacidad de buscar un empleo y adaptarse en el nuevo puesto de trabajo como también a la organización, implica para las personas contar con capacidades que les permitan tener una apertura a procesos de cambios y a la permanente búsqueda de perfeccionamiento para ir acomodándose a la dinámica de los diferentes sectores productivos.
En este sentido, la reciente Expo Laboral 2018 que cobijó nuestra sede en Osorno, pudo no sólo convertirse en una instancia de acercamiento donde las empresas tuvieron la posibilidad de acceder al capital humano especializado, evento que -de paso- fue abierto a la comunidad y que congregó a más de 700 personas; también abrió un espacio de reflexión en torno a las tendencias laborales.
Sintonía fina con el mundo laboral, que como universidades debemos mantener a través de un modelo de enseñanza que favorezca la empleabilidad bajo el concepto antes mencionado, considerando que las empresas se encuentran en permanente movilidad. El desafío entonces es educar a nuestros jóvenes para lo ya conocido, pero también entregar las herramientas de formación que les permita ser los suficientemente audaces y abrirse a lo desconocido. Así, habilidades como la empatía, la ética, la colaboración y la pasión por moverse en un mundo cambiante es algo que debemos como institución fomentar en un espacio académico de calidad, que permita la formación de los profesionales que necesita nuestra región y país y que contribuyen de manera decisiva al desarrollo de Chile.
Rodrigo Ibáñez, vicerrector Universidad Tecnológica de Chile Incap, sede Osorno