Contaminación del aire: episodios críticos crecieron 45% en 2018
EMERGENCIA. Tras concluir el periodo de gestión, definido entre abril y septiembre de cada año, se constataron 29 emergencias y 35 preemergencias, con un total de 64 jornadas, muy superior a las 44 del año pasado. En paralelo, las urgencias y hospitalizaciones por enfermedades respiratorias también sufrieron un alza.
El intenso humo cubriendo diversos sectores de la ciudad, es una imagen que volvió a repetirse una y otra vez durante este otoño e invierno en Osorno. En un año con muy bajas temperaturas, los 5,8 grados bajo cero registrados el 3 de junio a las 8:03 de la mañana, uno de los días más fríos de la temporada invernal, marcaron la antesala del peak de contaminación que hubo durante la noche de esa jornada: 1.284 microgramos de material particulado fino MP 2.5 a las 21 horas, superando 24 veces la norma fijada en 50 microgramos.
Una prueba del retroceso que sufrió la ciudad en los índices de contaminación por material particulado fino MP 2.5 durante el periodo de gestión de episodios críticos por contaminación, plazo fijado entre el 1 de abril y el 30 de septiembre de cada año, tal como estipula el Plan de Descontaminación Ambiental de Osorno (PDAO).
Según informó la Seremi de Medioambiente, al 27 de septiembre, el Sistema Nacional de Medición de Calidad del Aire constató en Osorno un total de 29 emergencias y 35 preemergencias, lo que da un total de 64 episodios críticos; mientras que en 2017 hubo 24 emergencias y 20 preemergencias, cerrando el año con sólo 44 episodios críticos.
De esta forma, los casos de mala contaminación del aire crecieron 45% en un año. Con ello, prácticamente se vuelve al punto de origen, ya que en 2016, el primer año de aplicación del PDAO, se constataron 34 emergencias y 35 preemergencias, lo que da un total de 69 jornadas críticas por mala calidad del aire.
El factor clima
En pleno invierno, los meses de junio y julio últimos registraron la mayor cantidad de episodios críticos. Aquí, mientras julio registró ocho episodios críticos, cinco más que en 2017 y 2016; en el mes de junio hubo seis emergencias, cuatro más que en 2017 y dos más que en 2016.
Una situación esperable para los meses más críticos del invierno (mayo a julio) dadas las bajas temperaturas. Así, en junio y agosto hubo nueve días con temperaturas bajo cero, mientras que julio registró 12 días bajo igual condición.
A ello se sumó el déficit de precipitaciones entre mayo y julio, lo que recién vino a superarse en agosto y hoy, entre 22 ciudades, Osorno es la única urbe del país que presenta un superávit de 4% de agua caída. "Este invierno estuvo más frío y estable, lo que fue más propicio para eventos de contaminación", dijo el meteorólogo del Tepual, Jaime López.
¿Por qué se dio esta condición? El déficit de lluvias obedecería a que "la zona centro sur viene saliendo de un episodio de 'La Niña' débil", sostuvo Arnaldo Zúñiga, jefe de difusión y monitoreo de la Dirección Meteorológica de Chile.
El experto también apuntó al anticiclón del Pacífico que provoca que los sistemas frontales lleguen muy debilitados. "Esto implicó que el aire estuviera más estable o 'quieto' afectando la ventilación de las cuencas, lo que incrementa las partículas contaminantes".
Enfermedades
Según datos del Hospital San José, durante el periodo de episodios críticos de contaminación, desde abril a septiembre, entre las 45.336 atenciones de urgencia, 10.784 correspondieron a enfermedades respiratorias, cifra levemente superior a las 10.606 del año pasado.
Mientras, las 1.021 hospitalizaciones de este año, versus las 603 de 2017, representan un incremento del 63.9%.
Francisco Cano, médico broncopulmonar y encargado del programa contra la tuberculosis del Hospital San José, señaló que existen estudios a nivel mundial y otros realizados en Santiago durante los años '90 que establecen que "si aumenta la contaminación, aumentan las consultas por enfermedades respiratorias. Está claro que las personas afectadas fallecen por patología respiratoria, cardiovascular y cáncer".
Respecto a Osorno, el especialista dijo que "hay muchos pacientes que se descompensan y sufren crisis en días con alta contaminación. Son pacientes crónicos afectados por problemas como asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, bronquiectasia y fibrosis pulmonar", detalló.
Ajustes al pdao
En tanto la seremi de Salud, Scarlett Molt, reconoció que "en comparación con 2017, se registró una mayor cantidad de episodios críticos, con una mayor cantidad de emergencias ambientales".
En cuanto a los episodios finalmente decretados (se diferencia de los constatados porque funcionan con un día de desfase y tras la firma del intendente), en 2017 hubo 15 preemergencias y ocho emergencias, y este 2018 se registraron 15 preemergencias y 19 emergencias.
La Autoridad Sanitaria realizó 584 fiscalizaciones, levantando 87 sumarios, de los cuales 79 corresponden a viviendas y ocho a fuentes fijas o industriales. Cifras nada alentadoras, ante lo cual la seremi Molt reiteró el compromiso de gobierno por realizar ajustes al PDAO y "seguir trabajando en todo el proceso de educación, con el municipio y diferentes organizaciones".
Mientras, el presidente de la asociación gremial Enelsur, Robinson Ocks, enfatizó que "el año pasado la contaminación disminuyó por un tema climático pero no por el aumento en leña seca".
Por lo mismo, la entidad gremial planea asistir a la Sago Fisur y en marzo próximo realizará una feria en la plaza de Armas "para promover el uso de leña seca".
Enelsur insiste en que el Estado debe invertir en el secado con tiro forzado. "Pero las autoridades apuntan al cambio de matriz energética que fomenta el uso de gas, parafina o pellet, pero no es la solución porque en el sur se consume leña que es el combustible más barato", reconoció Ocks.
Para regular el tema, remarcó que el Gobierno debe cumplir su compromiso en declarar la leña como combustible, lo que sucedería recién el segundo semestre de 2019.
10.874 urgencias por causas respiratorias, atendió el Hospital San José, entre abril y septiembre, mientras en 2017 hubo 10.606 urgencias; además de 1.021 hospitalizaciones este año y 623 en 2017.
Julio con más emergencias registró en 2018, con 8 episodios críticos, cinco más que en 2017 y 2016, sigue junio con 6 emergencias. Julio fue el mes con más días con temperaturas bajo cero (12 en total).
584 fiscalizaciones realizó la Autoridad Sanitaria, cursando 87 sumarios, de los cuales 79 correspondieron a viviendas y 8 a industrias.