Llevamos 10 años estancados como rubro lechero. Y esto no se debe a la mala relación entre productores e industria, ni tampoco a la falta de eficiencia de los productores, ni menos a la baja calidad de nuestra leche. Esto se debe a la imperfección del mercado lechero y a las erradas decisiones estratégicas de las empresas transnacionales lecheras presentes en el territorio nacional.
La baja del pago a los productores de hasta 16 pesos recientemente anunciada por Soprole, filial de Fonterra en Chile, sumado al aumento de las importaciones al país, tiene hoy en jaque a todo el sector productivo lechero.
El enorme aumento de las importaciones de lácteos lideradas por Fonterra, que en la actualidad superan la totalidad de la producción de toda la Región de Los Ríos, equivale a 720 millones de litros. En términos económicos, esta situación significa que a las dos regiones lecheras dejarán de ingresar 25 mil millones de pesos anualmente, con las graves consecuencias del caso.
Iniciamos de esta manera junto a Fedeleche un proceso de salvaguardia, que acaba de ser acogida a trámite por la Comisión Nacional Antidistorsiones. Nos reunimos en Santiago con el actual ministro de Agricultura, Antonio Walker, para entregarle nuestra visión sobre los actuales problemas del sector. Y también hemos presentado nuestra realidad al senador Rabindranath Quinteros, al diputado Iván Flores y al diputado Harry Jürgensen Rundshagen, quienes han dado eco a nuestras demandas.
Y esta semana el presidente de la asociación entregó una carta a la embajadora de Nueva Zelanda en Chile, Jacqueline Cain, en el marco de la exposición Field Days. Quisimos informarle de la baja injustificada de precios por parte de Soprole que afecta a los productores, limitando la inversión en nuevas tecnologías provenientes justamente de Nueva Zelanda, dañando así el intercambio económico entre ambos países.
Hoy hacemos un llamado a todos los que nos siguen y apoyan: los necesitamos más cerca. A los que no se interesan, les recordamos que no existe rubro que no esté relacionado directa o indirectamente con la leche. Y a quienes nos critican, los escuchamos, porque los necesitamos a todos, para lograr resolver este grave problema que afecta fuertemente al corazón lechero del país.
Dieter Konow, presidente de Aproleche Osorno