"El arte en Osorno está teniendo un renacer", reseña con alegría el destacado pintor osornino Raúl Paredes. Con más cuatro décadas de recorrido como artista visual y profesor de pintura, es parte del directorio del Museo Surazo y bajo sus ojos pasan todas las obras que finalmente se expusieron en la tradicional Colectiva de Septiembre de la institución.
Esta muestra tiene como finalidad incentivar el arte en variadas disciplinas y técnicas visuales, tales como pintura al óleo, acrílico, dibujo, grabado, fotografía y escultura. Además de convocar a todos los artistas visuales de la provincia, sean consagrados o aficionados. La idea es ampliar el espectro.
Paredes precisó que "es una curatoría (elección y organización de una muestra) muy liviana, tratamos de que toda la gente participe, aunque hacemos una selección, eso sí, de todo lo que nos llega. Se le permite a la gente que llegue hasta con 5 pinturas, eso significa que por lo menos una vamos a dejar en la exposición. Eso dependerá de la calidad de los trabajos y del espacio que tengamos".
La finalidad es abrir un espacio para que el arte emerja y sea parte activa del circuito cultural que compone el Surazo, el Centro Cultural Sofía Hott, la Corporación Cultural de Osorno y la Alianza Francesa.
Entre las obras destacan las realizadas por Mauricio Álvarez, pintor osornino. Bajo elementos en desuso, pinta sobre ellos variadas ilustraciones. Muchas de ellas ya habían sido expuestas en junio recién pasado en la muestra "Disfuncional" del Sofía Hott.
Materia prima
Respecto a los trabajos, desde el Museo Surazo dijeron que están muy conformes con las obras de los 37 artistas, donde predomina la pintura y algunas esculturas. Varias destacan por los colores y la belleza de las mismas.
Paredes fue claro en señalar que hay material para confiar en el arte de las generaciones venideras.
"En esta exposición hay gente nueva que está marcando la pauta. Siempre he dicho que Osorno adolece de una situación especial: estamos los más viejos que tenemos una trayectoria más o menos larga y estamos vigentes, después hay un vacío generacional y después viene la gente joven".
Asimismo, agregó que la llegada de nuevos profesores de artes visuales a la ciudad pueda significar una especie de cuna de nuevos artistas y que no solo se dediquen a la docencia. La idea es que haya mayor flujo creativo y que eso se traspase a los estudiantes.
"Tengo la esperanza de que la gente joven marque una nueva época en el arte de Osorno, hemos tenido excelentes cultores a lo largo de la historia, como Sergio Montecinos, Artemio Torres, Mario Barrientos, todos ellos marcaron una época", rememoró el destacado pintor.