Fiscalía no apoya fin de prisión preventiva para comuneros en huelga de hambre
ARAUCANÍA. Persecutor jefe de la región se opone a petición de Ministro Fernández.
Mario Fernández, titular del Ministerio del Interior, solicitó la noche del miércoles que se modifique la medida cautelar de prisión preventiva para los cuatro acusados por la Ley Antiterrorista por la quema de una iglesia evangélica en la región de La Araucanía, quienes se encuentran hace más de 110 días en huelga de hambre. Sin embargo, el fiscal regional de La Araucanía, Cristián Paredes, anunció que el Ministerio Público se opondrá a la idea del Ejecutivo.
Según el persecutor jefe de esa región, los imputados Alfredo Tralcal y los hermanos Ariel, Benito y Pablo Trangol "son un peligro para la sociedad y esa situación no ha cambiado".
"Nosotros entendemos que la única medida que garantiza el fin del procedimiento es la prisión preventiva y más aún si tenemos en consideración que ayer (miércoles) el Tribunal de Garantía, en una decisión que discrepamos, dispuso la revelación de la identidad de algunos de los testigos de dicho proceso. Decisión que nos parece que es adecuada y que pone en riesgo la seguridad de estos testigos", señaló.
Paredes, además, reveló que nadie del Gobierno se comunicó con ellos para contarles de la decisión de solicitar el cambio de la prisión preventiva de los comuneros. "Nosotros tomamos conocimiento a través de las noticias de dicha decisión", dijo.
El fiscal no es el único que se opone a la idea. El senador Alberto Espina (RN) considera que esto implica el fin de la Ley Antiterrorista, a pesar de que Fernández aseguró que esa querella se mantiene. "El ministro del Interior, en un acto de cobardía política, no es capaz de mantener la decisión de aplicarle la ley a quienes están acusados, no de un delito menor", señaló.
Por otro lado, el comunero Benito Trangol, quien lleva 115 días en huelga de hambre y el miércoles dejó de consumir líquidos, fue trasladado al Hospital Intercultural de Nueva Imperial, por causas no reveladas. Su abogado, Christopher Corvalán, dijo a radio Cooperativa que se encuentra estable pero "muy delicado".