"Terrorismo laical"
Este último tiempo los fieles laicos cristianos católicos de Osorno hemos presenciado y escuchado muchas barbaridades en torno a nuestra fe. Supuestos laicos empeñados en una cruzada de limpieza de la Iglesia Católica, no sólo aquella que peregrina en nuestra ciudad, sino mundial, se encargan a través de las redes sociales de "basurear" cada vez más lo que ellos quieren limpiar.
Sería repetitivo mencionar que se refieren al Papa como cerdo, miserable y mentiroso; como interrumpen eucaristías, o como encadenan lugares sagrados. De estos personajes ya nos podemos esperar cualquier cosa, pero lo acontecido las últimas semanas sobrepasa cualquier límite.
Una de las palabras que ha sonado bastante y que ha sido enmarcada en una serie de contextos no sólo nacionales, sino internacionales, es el concepto "terrorismo". Según su definición, se entiende por terrorismo aquello que persigue la creación de un clima de terror e inseguridad y que cause de esta forma, intimidar a sus adversarios. Estos supuestos laicos, en su lucha por limpiar la Iglesia a través de sus "grandes virtudes", han emprendido una campaña terrorista, la que perfectamente la podríamos llamar terrorismo litúrgico laical.
Una serie de llamadas y amenazas por los medios de comunicación convocando a no sólo el mundo creyente, sino que todo aquel que está de acuerdo con sus "luchas", a que lleven carteles, griten e interrumpan una celebración tan hermosa y representativa para todo creyente que ama su patria como es el Te Deum. ¿Acaso buscarán intimidar a sus adversarios (que ellos sólo se inventan), que como dijo uno de sus miles de voceros es la jerarquía de la Iglesia Católica que ya no le creen?, o quizás quieran formar un clima de terror para que la señora que quiere ir a encomendar su patria al Buen Dios salga arrancando al ver esta jauría de lobos con pieles de oveja.
Hay algo que me queda claro, y esto lo saqué en conclusión después de leer una entrevista a otro de sus tantos voceros que afirmaba que en todos lados "le cierran las puertas": vuelven a ratificar las palabras del Papa cuando los llama tiernamente de tontos, ya que con todos estos hechos descritos, ¿quieren que les abran las puertas del cielo también?
Por más que ventilen sus curriculum eclesiales por el diario, les recuerdo que Karadima gozaba de uno mucho más ostentoso que el de ustedes.
José Manuel Rozas Navarro
Te Deum evangélico
No teniendo ningún interés de polemizar con el pastor Carlos Martínez y su epístola publicada en este medio (el pasado jueves), debo señalar algunas consideraciones que hace en forma poco acertada, sesgada, visceral y desconsiderada a la Presidenta Bachelet, en cuanto, según él, lo que ha sido la conducta y actuar como gobernante. En su misiva, el pastor denota ignorancia o desconocimiento deliberado de lo que es la figura presidencial en Chile; ejercida por una Presidenta elegida por intermedio de elección popular.
Cuando dice que la Presidenta, si está en ese puesto es por voluntad de Dios, y que ha "deshonrado sus leyes", simplemente es una manera elegante y poco inteligente para justificar el aprovechamiento que se hizo en este extraño Te Deum evangélico, con cierto rasgo de proselitismo político; a juzgar por los candidatos al Parlamento ejerciendo de obispos y pastores en dicho acto seudo religioso.
Olvida el pastor que la Presidenta fue elegida democráticamente con una amplia mayoría y, con ello, se aceptó su programa de gobierno. En su misiva, apela a la libertad de expresarse al justificar lo injustificable. A mi modo de ver, fue un uso y abuso lo que hicieron los dueños de casa. Por lo demás, el gobernante de turno tiene que velar y considerar a todos los que habitan en el país, moros y cristianos, creyentes y no creyentes, por cuanto las leyes son para aquellos que las necesitan.
Gracias a Dios y los forjadores por un Chile democrático, somos un país libre, con derecho a elegir y tomar muestras propias decisiones y no que nos impongan ideas o pensamientos que no son las nuestras.
Carlos Angulo Benavides
Descentralización del país
Quien asuma la Presidencia de la República obviamente va a tener variadas prioridades que deberá enfrentar, aparte de la educación y la salud. Me refiero a la descentralización del Estado, esto es, a que el presupuesto nacional sea más equitativo. No puede ser que la capital se lleve la mayor parte de los recursos fiscales.
T odos estamos conscientes que es la capital, pero las regiones se quedan con un presupuesto insuficiente para su normal desarrollo armónico del país. De lo contrario, será como un monstruo cuya cabeza crece y crece, pero el cuerpo no. Es imperativo que cambie esto por el bien del país.
Un gran desarrollo de sus regiones generaría una economía más inclusiva, más armónica, más justa. Estamos también conscientes que en cuatro años no se va a cambiar radicalmente, pero se podrán sentar las bases a través de leyes que fomenten el desarrollo de las regiones conforme a la naturaleza de su economía productiva.
Hernán Rosas Arriagada