Crisis en Diócesis de Osorno
Osorninos míos, nada nuevo bajo el sol ocurre en la Iglesia de ayer y de hoy, y si el impulso misionero de Pablo era ir siempre avanzando, al apóstol Pedro se le conoce por su actitud dubitativa y traicionar al Maestro. Ante tanta pregunta sobre avanzar o retroceder manteniendo la virtud superior y culpando a unos de ser quejumbrosos manipulables y a otros de verborreicos lingüísticos, nos encontramos con que el obispo (Juan) Barros constantemente falta a la verdad, con una nunciatura apostólica caracterizada por sus silenciosas intrigas y con la comunidad eclesial en Osorno enfrentado una grave división.
Esta crisis se refuerza con sacerdotes que son expulsados de la diócesis, jóvenes y sus familias que quieren vivir el sacramento de la confirmación sin la presencia del obispo; entre tantas otras situaciones conocidas, pero que quieren invisibilizar. Al final, quienes tratan de ideológicos a los opositores a Barros ven la viga en el ojo ajeno, pero su actuar termina trasluciendo sus propias ideas e intereses.
Felipe Navarrete Moya
Corte de pasto y velocidad
Yo vivo en la calle Buenos Aires de Osorno, donde de vez en cuando pasan los cortadores de pasto contratados por la municipalidad. Llegan más o menos a las 7 de la mañana metiendo ruido, pero más que cortar el pasto, pasan macheteando. No sé si esto lo supervisa alguna persona, lo dejo para que alguien de la municipalidad se acerque; y para remate, pasan cortando las plantas.
Lo segundo de esta carta es por el tema de la velocidad (de los vehículos) entre calle Rodríguez y Buenos Aires. Ustedes quisieran escuchar como pasan los autos por las tardes, piensan que son pistas de carrera. Lo dejo para que lo digan y pongan cartas en el asunto las autoridades pertinentes, antes que tengamos una desgracia.
Manuel Rosas
Taxistas y La Araucanía
¿Por qué el Gobierno actúa con tal celeridad ante la manifestación de los taxistas, restableciendo el orden público, y no tiene el mismo énfasis en La Araucanía, ante los ataques incendiarios a camiones?
Javier Labrín Jofré
Proyecto Dominga I
El caso Dominga, al igual que el de Hidroaysén, fueron iniciativas o mega proyectos que, en razón al rechazo de su desarrollo por razones ambientalistas más que técnicas o económicas, dejan una advertencia conveniente de considerar para los próximos ejemplos similares, en este u otros gobiernos. Para evitar el alto costo de los estudios fundamentales que requieren dichos proyectos, convendría establecer una previa presentación de cada caso, adelantando las argumentaciones técnicas elementales, puesto que es difícil entender que una apreciación política o ambiental final -como la existencia de una colonia de pingüinos fuera de su ambiente patagónico o daño ambiental-, fuese de tal importancia como para rechazar un importante proyecto después de años de gestación.
Una previa consulta oficial para un proyecto de envergadura evitaría su estéril desarrollo. En el caso de Dominga, bastaba con desalentar a sus autores inicialmente al adelantarles que habiendo pingüinos cerca o arriesgando el correcto mantenimiento ambiental de la zona, era poco probable que este gobierno lo aprobara.
David Benavente
Proyecto Dominga II
Sólo pasaron unas pocas horas para que el Gobierno, en voz de la ministra (Paula) Narváez desautorizara la opinión del flamante ministro de Economía, Jorge Rodríguez Grossi, porque mientras que para la vocera el proyecto Dominga está cerrado, para el secretario de Estado aún se puede llevar a cabo.
Una de cinco, una vez más el protocolo de selección de personal gubernamental falló, el ex ministro Rodrigo Valdés tenía toda la razón, aún cada día puede ser peor, es una realidad irrenunciable, o mejor paso.
Luis Enrique Soler
Unidad nacional
Una sociedad dividida, con un alto nivel de conflictualidad, produce una disociación del cuerpo político y juega un papel desintegrador que impide la consecución de los objetivos de esa misma sociedad. Es preciso superar las divisiones sobre la base de descubrir y reforzar lo que nos une y debilitar lo que nos separa.
Se trata de ser capaces, con realismo, audacia, imaginación y coraje, mediante entendimientos políticos y fórmulas jurídicas; de provocar "la unidad de los contrarios". En este Mes de la Patria, especialmente, debemos evitar magnificar aquellos factores que nos dividen y, por el contrario, destacar la herencia que nos es común a todos los chilenos.
Adolfo Paúl Latorre