Un sencillo estacionador de autos encontró en la calle un sobre con mucho dinero y a pesar de su pobreza y su necesidad material, lo devolvió voluntariamente a sus dueños. Se hizo famoso en todo Chile por su honradez y motivó mi búsqueda por este valor.
¿Qué es la honradez? Es definida desde la antigüedad como un valor moral fundamental de la vida de las personas en sociedad y se basa en el respeto mutuo y en la verdad. Es la cualidad de quien obra con rectitud, actúa con justicia y honestidad. La honradez de una persona demuestra que es alguien digno de confianza. De allí que la honradez sea fundamental para las relaciones humanas y las actividades que se basan en ellas, como el trabajo, la vida en comunidad, el comercio, el ejercicio profesional, la política, los cargos públicos y las autoridades civiles, militares y religiosas. Una persona honrada no roba, no miente, no engaña, no traiciona, se guía por valores morales, el respeto de las leyes y el respeto hacia sus semejantes.
¿Vivimos y actuamos como personas honradas nuestra vida diaria? ¿Es un valor practicado masivamente o excepcionalmente en Chile? La honradez también deriva de la palabra honor, por eso la persona honrada es digna de gran respeto. La persona honrada tiene como principio de vida, la justicia, y la aplica siempre, sobre todo al momento de acatar las normas impuestas tanto en su sistema jurídico como aquellas que son tomadas como normas de costumbre en su comunidad. Un ejemplo de una persona honrada es este estacionador de autos que encuentra un objeto de valor, y aunque tenga una gran necesidad económica lo devuelve a su dueño porque sabe que es lo correcto. Ha demostrado ser un hombre honorable, a pesar de su pobreza.
¿Cómo hacer que este tipo de personas se multipliquen? ¿De qué forma debemos criar a un hijo para que se convierta en un ser honrado? ¿Basta con las enseñanzas en sus primeros años de vida, con los ejemplos de parte de sus mayores? ¿O realmente existen individuos que jamás robarían, que jamás harían daño a otro ser vivo, que siempre dirán la verdad y nunca traicionarán porque llevan ese valor en su genética, a pesar que la experiencia les muestre lo contrario?
El valor de la honradez inculcado en todos los niños desde edades tempranas parece hacer milagros. Desde muy pequeños pueden entender que el quebrantamiento a los principios de la honradez es el principal causante de los conflictos humanos, los crímenes, la corrupción y las guerras. El problema es que los padres no lo decimos claramente o no lo tenemos tan claro.
Raúl Ilharreguy, arquitecto