Árboles de la Plaza de Armas
El Austral de Osorno en su edición del viernes pasado informaba que un árbol de la especie roble americano fue talado por la municipalidad local, aduciendo que estaba dañado en su madera. No obstante, llama la atención que el mencionado árbol no presentaba un deterioro evidente.
Bien sabemos que los árboles cumplen un ciclo de vida, no obstante, existe la esperanza que con buen tratamiento puedan prolongar algo más su existencia, como hubiese sido con el árbol talado. Es por ello que la Red Ambiental Ciudadana de Osorno ha manifestado la necesidad de que se efectúen permanentemente trabajos de mantención fitosanitarios del arbolado de la plaza de Armas, como también en otros lugares públicos.
Es más, hace tres años atrás a Carlos Medina, encargado de la Dirección de Medio Ambiente, Aseo y Ornato de la municipalidad local se le planteó esa iniciativa y se comprometió a realizar reuniones de trabajos. Hasta la fecha todavía seguimos esperando su llamado.
En un informe contratado por el municipio local, "Diagnóstico Sanitario del Arbolado Urbano de la Plazuela Yungay, Plaza de Armas, Avenida Mackenna", de la Universidad Austral de Chile, del año 2010, se confirmaban los problemas fitosanitarios de los árboles de la plaza de Armas, señalando sus causales y la responsabilidad que le cabía a la Municipalidad de Osorno en realizar una adecuada mantención. Los árboles de nuestra plaza son organismos vivos que merecen nuestra atención y respeto por sus aportes al patrimonio naturales e histórico de nuestra ciudad.
Ricardo Becerra Inostroza, presidente de la Red Ambiental Ciudadana de Osorno
Huilliches en el sur de Chile
Agradezco el interés del diario por relevar el conocimiento sobre los mapuche-williches y también por evidenciar el desconocimiento que destacados historiadores tienen sobre los habitantes originarios de estas tierras del sur. El desconocimiento del Premio Nacional de Historia, Gabriel Salazar, así como antes del también Premio Nacional de Historia, Jorge Pinto Rodríguez, considero que lesionan gravemente el proceso de revivalismo sociocultural que vienen desarrollando desde hace unas décadas las comunidades indígenas de la Región.
La historiografía nacional, así como también la regional, durante muchas décadas ocultó la existencia de los mapuche-williches en una estrategia ad hoc para sostener la legitimidad de la colonización agrícola de la Región sobre una inferioridad innata de los mapuche-williches por la que no tenían derechos que pudieran exigir. Los dichos de tales historiadores son el resultado de esa tradición del darwinismo social que fue inscrita en los textos de historia sublimando la historia de los modernizadores y enviando al olvido a los pueblos indígenas.
Los indígenas habrían desaparecido inevitablemente por el empuje del desarrollo, despojados de sus bienes y eliminados de la historia. Esta historia no transcurrió a espaldas de la historia de los mapuches de La Araucanía. Tampoco fue seguida de la ocupación del territorio mapuche de La Araucanía al territorio nacional. Este antiguo territorio mapuche-williche fue declarado territorio de colonización antes que fuera anexada y colonizada la antigua Araucanía, siguiendo la política universal de la colonización: ignorando los derechos de la población originaria y construyendo una imagen legitimadora de la expoliación.
Los hechos de La Araucanía han contribuido a construir una imagen icónica en Gabriel Salazar y Jorge Pinto que reinciden en mantener a los mapuche-williches en el olvido historiográfico como una de las tantas consecuencias del olvido donde quisieron recluirlos los criollos de elite en las primeras décadas del siglo pasado. Los organizadores de estas exposiciones, entre los cuales se encuentran varios descendientes mapuche-williches, debiesen educar previamente a sus ilustres invitados, como hacen muchas comunidades indígenas que orgullosamente muestran señas de continuar existiendo para que el mundo sepa.
Eugenio Alcamán, antropólogo e historiador mapuche
Club México y vóleibol
Bien por el Club México, que mueve el vóleibol y gana un torneo este mes. Ojalá otros lo sigan en esta actividad.
Germán Álvarez Hetz
Educación y Abdón Cifuentes
En momentos en que el Ministerio de Educación está cambiando las bases curriculares de tercero y cuarto medio, en que la Superintendencia de Educación le impone obligaciones a las escuelas sobre el trato hacia niños y jóvenes trans, y en que el Gobierno impulsa un proyecto para trasladar hacia la administración central las escuelas gestionadas actualmente por los municipios, resulta oportuno recordar a Abdón Cifuentes, quien señalase hace más de un siglo atrás que monopolizar la enseñanza en manos del Estado es atribuirle a éste su dirección exclusiva, es oprimir a la vez la razón y la conciencia de los ciudadanos.
Iván Garay Pagliai