Falta de apoyo al Provi
La lamentable situación que vive Provincial Osorno, por la reciente falta de apoyo efectivo a su corporación deportiva en formación, es una materia que podría explicar su patético paradigma a la luz de su notable asunción al fútbol rentado.
Objetivamente, el nombre de la institución arrastra el estigma de un histórico endeudamiento y mala administración desde la Primera División de 1983, por incumplimientos financieros y sin mayores responsabilidades dirigenciales. Por tal motivo, el año 2006 la sociedad anónima de los señores Silva y Tupper no lograron contar con el respaldo accionario de los osorninos en general.
Esta entidad duró hasta el año 2012, en que fue desafiliada de la Segunda División profesional por nuevos endeudamientos, dañando de paso seriamente la imagen y representación de toda la ciudad, lo que parece hoy olvidan muchos. Mediante un subterfugio jurídico, con otro RUT se logró evitar las cobranzas anteriores, pero manteniendo el mismo nombre en el fútbol amateur de Anfa, logrando a partir de 2013 incursionar con éxito para retornar a fines del año pasado al fútbol de la ANFP, que exige mucha plata por intermedio de una nueva sociedad anónima, modelo bastante cuestionado en el mundo futbolístico y empresarial.
Todo esto abre la interrogante respecto a la mantención del actual apoyo municipal hacia una entidad privada con fines de lucro, después de constatar un débil apoyo a la corporación deportiva. El panorama es muy complicado por la indiferencia ciudadana y falta de compromiso de inversionistas en una actividad muy compleja e imprevisible por los intereses en juego.
Luis Lagos Fuentes
Quemas autorizadas
Me gustaría exponer mi gran inquietud frente a las quemas autorizadas de basura orgánica e inorgánica en predios agrícolas. El miércoles de la semana pasada, mientras andaba en bicicleta hacia la salida norte de Osorno, me encontré con una tremenda nube café y gris por la que tuve que pasar entre medio, cerca de un campo en el cual no podía respirar. La nariz me picaba mucho y la sensación de ardor en mi garganta y nariz eran insoportables. Mi primera reacción, fuera del asombro de lo que estaba sucediendo, fue llamar a Carabineros y denunciar lo que estaba sucediendo, pues no sé si en esta época del año están autorizadas las quemas de rastrojos.
Por el color negruzco del humo que salía dudo que haya sido sólo orgánico. ¿Quién fiscaliza esto?, y más que fiscalizar o no, ¿cuál es el sentido de las alertas de emergencia durante el invierno y restricciones vehiculares si dos meses antes comenzamos a quemar como locos? ¿Estamos conscientes de que somos una de las ciudades más contaminadas del mundo?
Hoy hay mil formas de evitar esto, hay empresas de reciclaje que van hasta los predios y retiran todo el material. Una de mis inquietudes en mi vida fue saber qué hacían con todo ese plástico extraído de los bolos una vez que alimentan a las vacas, y cuando me enteré que lo quemaba la mayoría de los agricultores, me quería morir. Más que rápido pensamos en algo y junto con mi familia pusimos una empresa de reciclaje de plástico para predios agrícolas.
¿Qué más tiene que pasar para que hagamos algo las autoridades, el SAG, Conaf y personas naturales?, porque como bien sabemos todo parte por casa. Detengamos la devastación de la tierra y entendamos que nada es para siempre, la sobrepoblación, el calentamiento global, es todo debido a la cantidad de contaminación que generamos. Entonces, ¿hasta dónde queremos llegar?, ¿qué más tiene que pasar, hasta cuándo seguir esperando?
Hagamos algo ya y dejemos de actuar tan pasivamente frente a todo lo que ocurre.
Denisse Püschel
Reforma a las pensiones
Es importante aclarar un punto muy importante sobre el aumento de cotización de 5% -en principio a cargo del empleador-, en particular sobre el impuesto del 2% que va a un fondo de reparto. Si nos enfocamos en los cotizantes de clase media del país, o los trabajadores dependientes que cotizan hasta el tope imponible de 75,7 UF ($2.000.000 bruto), vemos que serán ellos los que finalmente pagarán la reforma previsional.
En primer lugar, a los miles de independientes de mayores ingresos, desde empresarios, abogados, dentistas, arquitectos, ingenieros, etc., siempre se les ha postergado la obligatoriedad de cotizar, por lo tanto, no aportarán nada. En segundo lugar, los grandes sueldos del país, como por ejemplo ministros y parlamentarios, aportarán un 2% del tope imponible, pero no de su sueldo bruto total que fácilmente cuadriplica el tope imponible, por lo que finalmente aportarán un 0,5% o menos.
Si el Estado no coloca un peso al fondo de reparto, queda claro que la reforma la paga la clase media como siempre, y si además logra una buena pensión, de seguro tampoco tendrá derecho al fondo al cual con su esfuerzo aportó mes a mes.
Eduardo Jerez Sanhueza