Chaqueteo en Chile
Este tradicional y criollo término en los últimos tiempo se ha exacerbado, y hemos pasado de ser una sociedad chaquetera a una chaquetera "pro". Lo anterior no es pacífico, toda vez que refleja lo peor de cada una de las personas que integran dicho conglomerado social, como envidia, falta de capacidad y sobre todo falta de un nivel de racionalidad también pro.
La política y sus actores no ayudan mucho, especialmente con ejemplos que son notables, como la idea del ex ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, que quería quitarle los patines a los estudiantes de mejor nivel para equilibrar, pero para abajo; o las groseras descalificaciones que recibió uno de nuestros mas destacados empresarios de parte de uno de nuestros diputados por el sólo hecho de ser "poderoso"; o la demonización del "lucro", llevando el término a una singularización de lo malo o pernicioso, como si las personas no buscaran obtenerlo en su mas íntimo interés. O la escalada de descalificaciones que ha recibido el ex Presidente Sebastián Piñera, por una supuesta incompatibilidad entre negocios y política, la que no tiene que ser per se, pero que los perdedores y chaqueteros han usado de manera reiterada para nivelar a los demás políticos, hacia abajo por cierto, como una forma de paliar su falta de capacidad y nivelar la cancha nuevamente hacia abajo.
Si no cambiamos la mentalidad y nos proyectamos hacia una sociedad "pro" y un desarrollo pleno, probablemente tendremos que seguir lidiando con perdedores, que buscan ocultar sus incapacidades e ineficiencia a través de la única herramienta disponible, el chaqueteo.
Héctor Álvarez Cárcamo, abogado
Corrupción y sociedad
Lo ocurrido en Carabineros es un ingrediente más de este síntoma putrefacto que está experimentando la sociedad hoy. Así como van las cosas, cuando finalice la actual década, los historiadores y analistas destacarán que el nuevo ciclo político, económico y social que se auguraba con la llegada al poder de la Nueva Mayoría y su ambicioso programa de gobierno; en realidad será la década donde el poder político, eclesiástico, deportivo, uniformado y empresarial han hecho trastabillar la estabilidad de su propia institucionalidad; donde la crisis de confianza y credibilidad ha sido pieza fundamental para que la ciudadanía cada día sea más escéptica e incrédula con los que tenían la obligación de dar señales claras de un buen comportamiento ético y moral.
Queda la sensación si las medidas que se están tomando para poner atajo a la corrupción, el abuso en todas sus formas, el enriquecimiento ilícito, la ambición de poder y la avaricia como la codicia, sean suficientes frente a una sociedad aspiracional, inserta en lo mediático y superficial; que al final del día se olvide con cierta facilidad por otros acontecimientos y así, tarde o temprano tengamos una ciudadanía con cero reacción y por sobre todo, sin capacidad de asombro.
Prueba de estas dudas o interrogantes es cuando vemos en el presente que los principios y valores se trastocan y se cambian los conceptos.
Carlos Angulo Benavides
Curriculum escolar y calidad
Con el retorno de los estudiantes, ha vuelto a la discusión pública el desafío de la calidad de nuestra educación. Esto, en parte importante, de la mano de la consulta ciudadana "Bases del futuro", organizada por el Ministerio de Educación (Mineduc) y que busca recopilar visiones y propuestas sobre cómo debiera ser el nuevo currículum para tercero y cuarto medio.
Esta es una oportunidad para conversar sobre calidad educativa que no podemos desaprovechar. De todos depende convertir este proceso en un hito importante que nos lleve finalmente a ajustar la educación que reciben nuestros niños y jóvenes, y alinearlas con los requerimientos y desafíos del presente y el futuro. La propuesta del Mineduc busca consolidar un plan común para la educación artística, humanístico-científica y técnico-profesional que entregue a todos los jóvenes una base cultural común más fuerte. Esto les permitirá construir una sociedad mucho más dialogante, creativa e innovadora, bajo el alero de los conceptos de ciudadanía y formación integral.
La construcción del currículum y la calidad educativa es un proceso continuo y colectivo, donde debemos aprender de los aciertos y errores del pasado, recordando qué y cómo aprendimos las generaciones mayores y qué creemos nos hizo falta. Esta es la oportunidad perfecta para que logremos que la experiencia que se vive en las aulas sea una herramienta para enfrentar la compleja realidad.
Rosario Navarro, directora de educarchile.cl, Fundación Chile
Guillier y Partido Radical
A propósito del Partido Radical, de su símbolo que es un gallo y de su decidido apoyo que le brinda a su candidato presidencial, es de esperar que Alejandro Guillier sea consecuente con el dicho que dice "Un buen gallo, canta bien en cualquier gallinero"
Luis Enrique Soler