Llegó marzo y con esto comenzamos con toda nuestra energía el trabajo en los distintos campamentos de la Región. Desde esta semana estamos invitando a todos los jóvenes a trabajar por una transformación de la realidad chilena, en un trabajo permanente para terminar con los campamentos y luchar por construir juntos el país que queremos: sin injusticias y sin desigualdad.
Hoy más que nunca nos sentimos con la necesidad de transformar el país, generando cambios estructurales desde nuestra convicción, movilizándonos por una causa clara. Sabemos que la idea impuesta por el neoliberalismo de que las causas de la pobreza son individuales y no responsabilidad de la propia sociedad, son falsas, por lo cual es aquí, desde este escenario, donde el rol de los jóvenes, de la sociedad civil organizada, y del voluntariado, cobra aún más fuerza.
Invitamos a todos los jóvenes a trabajar por transformar el país, en conjunto con familias de campamento que diariamente tiene que luchar por sobrevivir, con trabajos precarios, con sueldos miserables, con empleos informales, marginados en las periferias de la ciudad, personas a las que les han arrebatado el acceso a derechos básicos, producto de un sistema avasallador, donde todo se transa en el mercado, dejando, por ejemplo, el sueño de la vivienda en manos de la especulación inmobiliaria y la indolencia de las constructoras.
Buscamos que más jóvenes se sumen al trabajo que realizamos, porque no queremos que nuestros derechos sigan siendo transados en el mercado, y que el acceso a ellos dependa de nuestra capacidad de pago. Queremos terminar con la acción violenta y permanente hacia miles de familias que son dejadas fuera por el sistema, importando más los capitales que las personas. No queremos más comunidades estigmatizadas y profundamente vulneradas.
Es deber de todos recuperar nuestros derechos que han sido entregados al mercado; es problema de todos que hoy existan hospitales y establecimientos educacionales de mala calidad, es problema de todos que familias que sueñan con una vivienda adecuada terminen en barrios mal localizados, alejados de los servicios, truncando su desarrollo integral.
Invitamos a todos los jóvenes de Osorno a trabajar con hombres y mujeres que mantienen la esperanza intacta de un Chile justo e igualitario, y transformar juntos esta realidad.
Giovanna Moreira Almonacid, directora regional de Techo-Chile