Yasna Barría
Para cerrar con un broche de oro los talleres musicales de verano, el conservatorio Carolina Klagges de Osorno, ubicado en calle Amthauer 874, desarrolló ayer un concierto artístico-musical, donde niños desde 3 a 12 años mostraron sus avances luego de un mes de trabajo.
La profesional encargada, Nubia Seguel, profesora de piano y de iniciación musical, dijo estar orgullosa y satisfecha del avance de los pequeños que este año llegaron en mayor número, alcanzando un total de 15 interesados en vivir una experiencia recreativa de formación musical.
Primeros pasos
Según explicó, las clases son personalizadas por edades y un ejemplo de ello es el taller de iniciación integrado por niños de 3 y 4 años de edad, donde los pequeños pueden explorar sus talentos musicales jugando y trabajando el ritmo, percusión, canto, así como conociendo también los instrumentos musicales.
Pequeños de otras edades también vivieron la experiencia y profundizaron en sus habilidades para el piano y donde además son formados a través del método Suzuki, que sostiene que cualquier niño a quien se entrene correctamente puede desarrollar una habilidad musical y en ese trabajo es imprescindible el apoyo de los padres. Y tal situación de respaldo familiar se evidenció este verano en el conservatorio Carolina Klagges, pues comparado con los talleres del año pasado, once niños nuevos llegaron a perfeccionar sus aptitudes, las que demostraron en el recital que protagonizaron ayer interpretando canciones infantiles del folclor europeo.
Experiencia
"Yo vine a aprender porque tenía que hacer otra actividad", comentó Rocío Sepúlveda, quien a sus apenas tres años de edad sabía perfectamente de lo que se trataba su aventura musical.
Su papá, Francisco Sepúlveda, contó que este año vieron el aviso en el diario y pensaron junto a la mamá de Rocío que era ideal para ella, porque le gusta mucho la música.
"Mi hija siempre se pasa cantando las canciones de la televisión y sin duda fue una buena opción para iniciarla en el desarrollo de sus aptitudes, por eso tenemos contemplado que continúe tomando clases", sostuvo el papá.
Zara Saldivia, de 4 años, también participante del taller inicial, dijo que se divirtió con las clases de percusión y las pelotas saltarinas. Aunque es pequeña, se le vio muy involucrada con su desempeño y no dudó en decir, "me gusta también el piano y me gustaría, cuando sea grande, ser pianista", sostuvo la pequeña.
Los quince niños que participaron en los cursos de verano lucieron sus avances la tarde de ayer en el concierto de cierre, donde se les apreció entusiastas de continuar durante el año y afianzar lo aprendido.
La profesora Nolbia Seguel sostuvo al finalizar el evento que se encontró con varias sorpresas de niños que nunca habían tocado piano, sin embargo poseían gran habilidad, por lo que sería bueno que continuaran perfeccionándose.
"Me gusta también el piano y me gustaría, cuando sea grande, ser pianista".
Zara Saldivia, Participante curso inicial"
"Vine a aprender porque tenía que hacer otra actividad".
Rocío Sepúlveda, Participante curso inicial"
niños participaron en el curso de verano del conservatorio de música Carolina Klagges de Osorno. 15