Un aumento de los casos de sarampión se registra en estos momentos en Osorno, preferentemente de adolescentes que están estudiando, situación que preocupa a los padres de familia, especialmente por las pruebas y exámenes de finalización del año escolar. Las autoridades descartan que se trata de un brote o epidemia.
"Tenemos todo muy chequeado, Osorno (…) es una ciudad muy importante, en pleno crecimiento y desarrollo"
Pablo Vera, presidente de la Cámara Empresaria Argentina, sobre vuelos
"Si bien las unidades críticas están funcionando, estas no son independientes del resto"
Verónica Wall, directora del
Hospital de Osorno, por efectos del paro
Ahora sí el inicio de la tercera etapa del paseo Ramírez se pondrá en marcha. Eso, luego que el intendente Jaime Bertín autorizada la adjudicación propuesta por la Municipalidad de Osorno a la empresa de Hormigones Especiales. Con ello, se dará ejecución dentro de un plazo de 170 días a la rehabilitación peatonal de Ramírez.
Una inversión cercana a los mil 800 millones de pesos fue destinada por la empresa Sodimac para construir su nuevo edificio de ventas, ubicado en René Soriano, a la entrada sur de la ciudad, y que será inaugurado el próximo mes. Por el tamaño de la construcción, este local promete ser el más grande del sur de Chile.
Continuando con una tendencia que se viene dando desde hace algunos años, un nuevo estudio volvió a demostrar el mejor posicionamiento que ha alcanzado la ciudad de Osorno como una urbe que ofrece una adecuada calidad de vida. Si en mayo pasado un informe que mide la calidad de vida de las personas en el país estableció que la capital provincial se ubicó por primera vez por sobre la media nacional, saltando del lugar 37 al 13, ahora otro estudio afirmó que Osorno continúa firme en la senda de ser una de las mejores ciudades de Chile para vivir, pasando de la octava a la séptima posición.
El primer estudio, llamado Índice de Calidad de Vida Urbana (ICVU), es confeccionado por el Instituto de Estudios Urbanos y Territoriales de la Pontificia Universidad Católica de Chile y la Cámara Chilena de la Construcción. En esa oportunidad, la ciudad destacó en dos de los seis ítems evaluados: Salud y Medio Ambiente, y Vivienda y Entorno, reflejando así el sostenido avance que ha experimentado la comuna en los últimos años en estas materias, sin obviar, naturalmente, las deudas que aún se mantienen, por ejemplo, en materia de déficit habitacional para las familias que aún residen en campamentos.
El estudio que ahora ha resaltado las cualidades de Osorno es el Barómetro Imagen Ciudad, que elabora la consultora Visión Humana. En esta oportunidad, la medición ha reconocido los atributos que posee la urbe en materia de conectividad, espacios verdes, limpieza en áreas públicas y oferta en el comercio y servicios.
Aunque la ciudad no figura en los lugares de avanzada en las categorías de mejor lugar para trabajar o para estudiar (respecto de lo cual sin duda todavía hay mucho por hacer), hay que reconocer que efectivamente Osorno ofrece reales condiciones para situarse entre las mejores urbes para vivir. Para medir esto, y simultáneamente comprender el estudio, no basta con mirarse hacia adentro, lo que es un error habitual. Es en la comparación donde Osorno sobresale; y esto deben valorarlo y compartirlo quienes viven en esta ciudad, tanto los que nacieron acá como los que se han hecho osorninos por adopción.
Los métodos de desarrollo urbano aplicados ya no consiguen dar respuesta a los problemas surgidos en el corazón de las ciudades. Resulta necesario buscar nuevas propuestas para la recuperación del pulso de nuestros barrios, regenerar el tejido urbano e inducir el dinamismo social que requerimos como ciudadanos.
Los espacios públicos son sin duda la masa crítica espacial donde se da la calidad de vida. De ahí, el desafío de desarrollar estrategias para poder revalorizarlos y poder entregarle a la ciudad distintas opciones para la interacción social. Es urgente la necesidad de pensar espacios que sean inclusivos y generen sentido de pertenencia. Espacios que propongan y sostengan la detención, el encuentro, el comercio o el ocio, lugares donde se construya identidad, donde uno se apropie del lugar, adaptándolo de acuerdo a la cultura, a lo propio. Ese es el propósito que debe guiar nuestra dirección hacia lo que entendemos por desarrollo urbano sostenible.
Apuntar hacia este desarrollo requiere observar nuestras calles, nuestros edificios, el cómo se relacionan entre ellos, observar todos y cada uno de los rincones y lugares que componen la trama urbana; y de este diagnóstico, levantar propuestas de intervención, recuperación, adecuación o potenciación de lo que tenemos. El análisis de nuevas opciones que nos permitan transformar esta persistente relación biunívoca que el espacio público actual nos propone, serán parte de los tópicos que abordaremos este martes en el segundo Seminario de Desarrollo Urbano Regional: "Re-Invención Urbana: Recuperación de Espacios Públicos y Privados", organizado por nuestra CChC Osorno.
Como gremio, y en este caso particular de la Comisión de Desarrollo Urbano y Patrimonio, nos sentimos llamados a propiciar el intercambio de ideas como parte de una estrategia de ciudad centrada en mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Para ello, creemos, es esencial generar vínculos privados-públicos que permitan brindar alternativas funcionales y novedosas a la ciudad, las que compartiremos en nuestro seminario.
El espacio público puede ser re-pensado y diseñado colectivamente desde nuestro entorno inmediato, desde el interés por recuperar lo local y lo que conocemos. Asimismo, la participación ciudadana y el diálogo deben ser el punto de partida para las actuaciones urbanísticas y la organización física de nuestra ciudad, apostando por el fortalecimiento de los espacios existentes por sobre la extensión de la ciudad.
Paulo Arce Moreno, arquitecto y
presidente de la CChC de Osorno
Los métodos de desarrollo urbano aplicados ya no consiguen dar respuesta a los problemas surgidos en el corazón de las ciudades. Resulta necesario buscar nuevas propuestas para la recuperación del pulso de nuestros barrios, regenerar el tejido urbano e inducir el dinamismo social que requerimos como ciudadanos.
Los espacios públicos son sin duda la masa crítica espacial donde se da la calidad de vida. De ahí, el desafío de desarrollar estrategias para poder revalorizarlos y poder entregarle a la ciudad distintas opciones para la interacción social. Es urgente la necesidad de pensar espacios que sean inclusivos y generen sentido de pertenencia. Espacios que propongan y sostengan la detención, el encuentro, el comercio o el ocio, lugares donde se construya identidad, donde uno se apropie del lugar, adaptándolo de acuerdo a la cultura, a lo propio. Ese es el propósito que debe guiar nuestra dirección hacia lo que entendemos por desarrollo urbano sostenible.
Apuntar hacia este desarrollo requiere observar nuestras calles, nuestros edificios, el cómo se relacionan entre ellos, observar todos y cada uno de los rincones y lugares que componen la trama urbana; y de este diagnóstico, levantar propuestas de intervención, recuperación, adecuación o potenciación de lo que tenemos. El análisis de nuevas opciones que nos permitan transformar esta persistente relación biunívoca que el espacio público actual nos propone, serán parte de los tópicos que abordaremos este martes en el segundo Seminario de Desarrollo Urbano Regional: "Re-Invención Urbana: Recuperación de Espacios Públicos y Privados", organizado por nuestra CChC Osorno.
Como gremio, y en este caso particular de la Comisión de Desarrollo Urbano y Patrimonio, nos sentimos llamados a propiciar el intercambio de ideas como parte de una estrategia de ciudad centrada en mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Para ello, creemos, es esencial generar vínculos privados-públicos que permitan brindar alternativas funcionales y novedosas a la ciudad, las que compartiremos en nuestro seminario.
El espacio público puede ser re-pensado y diseñado colectivamente desde nuestro entorno inmediato, desde el interés por recuperar lo local y lo que conocemos. Asimismo, la participación ciudadana y el diálogo deben ser el punto de partida para las actuaciones urbanísticas y la organización física de nuestra ciudad, apostando por el fortalecimiento de los espacios existentes por sobre la extensión de la ciudad.
Paulo Arce Moreno, arquitecto y
presidente de la CChC de Osorno