La municipalidad debe velar por el desarrollo de la comuna y mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Además, algunas de las responsabilidades del concejo municipal son incluir a la comunidad en los asuntos del municipio y fiscalizar el funcionamiento del municipio. Desde este escenario, presentamos ante el Concejo Municipal de Osorno -donde gran parte de sus integrantes fueron reelectos- cifras de nuestro Catastro de Campamentos 2016, aclarando dudas respecto de los campamentos que existen en la comuna, además de esclarecer prejuicios que rondan en el imaginario colectivo y que se han instalado fuertemente en nuestra sociedad.
Hoy, 767 familias viven en condiciones precarias en la ciudad, y es necesario poner la urgencia necesaria a este tema para que las familias y los campamentos no sigan en aumento. Hemos visto cómo se han ido buscando soluciones y se han levantado proyectos innovadores que demuestran que el municipio está pensando en una ciudad inclusiva e integrada, lo que se valora.
El gran desafío hoy es discutir y pensar cómo seguimos avanzando e integramos a dirigentes sociales en este proceso, y es por ello que es crucial el rol de los concejales. Lo que ocurrió en la última sesión de concejo fue inspirador, pues vimos lo comprometidos que se mostraron los ediles al mencionar las propuestas que las mismas dirigentes elaboraron en la Mesa Territorial que mantenemos hace más de un año. Esta propuesta busca mejorar la ciudad, aportando desde la experiencia en el trabajo territorial, de organización de bases ciudadanas. Para nosotros, y para los cientos de familias que habitan los campamentos, es un gran avance saber que existe disposición por parte de las autoridades para agilizar los procesos en temas de vivienda, y formar una mesa de trabajo en el cual sean incluidos dirigentes sociales, donde se piense y se aporte al desarrollo comunal.
Hoy más que nunca los necesitamos del lado de las familias de campamentos, necesitamos que ese compromiso radique en un mejor futuro para los niños y niñas que habitan los campamentos y ven truncado su desarrollo. Necesitamos que la prioridad del municipio esté de parte de las familias más vulneradas, y que bajo su rol fiscalizador pueda verificar que los compromisos se cumplan.
Giovanna Moreira Almonacid, directora regional de Techo-Chile