En el marco de la campaña nacional sin femicidios impulsada por el Servicio Nacional de la Mujer (Sernam), la Oficina Municipal de la Mujer de Río Negro y las monitoras certificadas que existen en la comuna, dieron el vamos este viernes 29 de julio a la cruzada "Río Negro sin violencia".

La actividad contó con la participación de carabineros, profesionales del Cesfam "Practicante Pablo Araya Araya", Senda y la Oficina de Deportes, quienes mantuvieron funcionando una serie de stands informativos sobre las redes de apoyo y contactos. En un cartel gigante los vecinos fueron estampando sus manos pintadas con témpera y en cuadros de fotos fueron adhiriendo y reforzando el sentido de la campaña.

"Valoramos la disposición de la gente a participar de estas actividades sensibilizadoras", dijeron las monitoras, anunciando que también se llevarán a cabo talleres y seminarios "a fin que todos seamos partícipes de la disminución de este flagelo que afecta fuertemente a mujeres y hombres", acotaron.

Nury Robarte explicó que la campaña culminará el 25 de noviembre con el día de la No Violencia de Género, "oportunidad en que esperamos realizar un encuentro masivo con presencia de representantes de toda la comunidad", dijo.

Asesorar y estimular la recuperación de los huertos huilliches entre las familias de las 30 comunidades indígenas existentes en la comuna de Río Negro, ha sido uno de los objetivos de los últimos años del Cacicado de Riachuelo cuyo apoulmen es Anselmo Antilef, apoyado de cerca por los profesionales del Programa de Desarrollo Territorial Indígena de Indap y de la Dirección de Desarrollo Económico Local, que de alguna manera u otra han incidido en los logros alcanzados hasta ahora.

El médico veterinario y responsable del PDTI, Jaime Ortiz, sostuvo que desde 2015 iniciaron formalmente la recolección de semillas y plantas comestibles poco conocidas, incluidas las hierbas medicinales que ancestralmente fueron utilizadas por los antepasados.

Se clasificaron las especies no tradicionales que están dentro o fuera del huerto con el fin de identificarlas con la ayuda de organismos técnicos. En esta segunda etapa el Cacicado de Riachuelo ha organizado, junto al PDTI y la Municipalidad un trafkintu, actividad huilliche donde se reúnen las comunidades con el fin de intercambiar plantas y semillas haciendo más fácil la diversificación y propagación de especies no tradicionales del huerto.

Charla

Se une a este acontecimiento que tendrá lugar el jueves 11 de agosto en el Liceo Agrícola Vista Hermosa desde las 9 horas con la acreditación, el intercambio de saberes, es decir, los conocimientos respecto al cultivo y manejo de las semillas con la ayuda de destacados expositores. Con ello se dará sentido a la protección de la biodiversidad agrícola para evitar el aumento de la desertificación local.

El trafkintu contará con la presencia de autoridades de Río Negro, la Región y el país, como del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo que estará representado por Alejandra Alarcón con la charla titulada "Trafkintu, una forma de lucha para combatir la desertificación local", precisamente. En la periferia del huerto huilliche rionegrino se ubican especies herbáceas de carácter aromático y medicinal, entre ellas la ruda, orégano, manzanilla, romero, toronjil y cedrón. También plantas herbáceas de mayor aroma y algunas hortalizas como el paico y el perejil.

Bladimiro Matamala

El sonido de la trompeta es tan brillante como su apariencia, un detalle que no pasó inadvertido entre los vecinos de Río Negro en las dos últimas semanas.

Un joven y solitario trompetista, sentado en los escaños de los asientos de la plaza de Armas, rompió la tradicional rutina urbana tocando diariamente y durante tres horas distintas y alegres melodías con una rigurosidad extraordinaria y disciplina digna de imitar. El intérprete hizo un alto en uno de sus largos conciertos invernales para conversar con este diario.

El protagonista de esta crónica es Pablo Orrego, quien interpreta dicho instrumento desde los 13 años.

Desde el norte

"Soy originario de Ovalle y estoy de vacaciones en Río Negro visitando a mi familia. Curso el último semestre de técnico agrícola en el Centro de Formación Técnica Santo Tomás en el norte del país. Pertenecí a la sinfónica de Pozo Almonte (Región de Tarapacá) con la cual hicimos una gira por Frutillar y Puerto Octay. También toqué en una banda religiosa", explicó el joven instrumentista.

-¿Cómo llegó su familia a vivir en Río Negro?

-Lo que pasa es que mi familia se vino hace un año a Río Negro por la enfermedad de mi padre, quien no soportaba el calor. Yo espero terminar mis estudios en la Primera Región este 2016, así es que debo devolverme.

-¿Y cómo ha sido la recepción en la zona?

-Muy bien, gente muy buena y solidaria. Amo esta naturaleza y el paisaje tan distinto al que tenemos en el desierto. Me invita a tocar la trompeta que es mi amiga inseparable, es como una retribución personal por la acogida (ríe).

-¿Sólo por eso toca tanto, o hay otra razón?

-Ayuda al espíritu. Mi vida hasta ahora ha sido buena, aunque en realidad sufrí bastante cuando más joven. Me crié con mi mamá porque mi padre se fue de la casa. Lo cierto es que vivimos con mi padrastro, él ha sido un buen hombre y está con nosotros, como le digo enfermo aquí en Río Negro.

El joven detalló que el resto de su familia la componen otros dos hermanos (una mujer y hombre). "Estamos saliendo adelante y es lo que cuenta. Ahora volveré hasta diciembre, porque me gustó el sur", expresó el joven, mientras volvía a tomar el instrumento con tal de sacarle las melodías que por al menos 15 días cautivaron a los rionegrinos.

"Amo esta naturaleza y el paisaje tan distinto al que tenemos en el desierto. Me invita a tocar la trompeta que es mi amiga inseparable"

Pablo Orrego"

Bladimiro Matamala

El sonido de la trompeta es tan brillante como su apariencia, un detalle que no pasó inadvertido entre los vecinos de Río Negro en las dos últimas semanas.

Un joven y solitario trompetista, sentado en los escaños de los asientos de la plaza de Armas, rompió la tradicional rutina urbana tocando diariamente y durante tres horas distintas y alegres melodías con una rigurosidad extraordinaria y disciplina digna de imitar. El intérprete hizo un alto en uno de sus largos conciertos invernales para conversar con este diario.

El protagonista de esta crónica es Pablo Orrego, quien interpreta dicho instrumento desde los 13 años.

Desde el norte

"Soy originario de Ovalle y estoy de vacaciones en Río Negro visitando a mi familia. Curso el último semestre de técnico agrícola en el Centro de Formación Técnica Santo Tomás en el norte del país. Pertenecí a la sinfónica de Pozo Almonte (Región de Tarapacá) con la cual hicimos una gira por Frutillar y Puerto Octay. También toqué en una banda religiosa", explicó el joven instrumentista.

-¿Cómo llegó su familia a vivir en Río Negro?

-Lo que pasa es que mi familia se vino hace un año a Río Negro por la enfermedad de mi padre, quien no soportaba el calor. Yo espero terminar mis estudios en la Primera Región este 2016, así es que debo devolverme.

-¿Y cómo ha sido la recepción en la zona?

-Muy bien, gente muy buena y solidaria. Amo esta naturaleza y el paisaje tan distinto al que tenemos en el desierto. Me invita a tocar la trompeta que es mi amiga inseparable, es como una retribución personal por la acogida (ríe).

-¿Sólo por eso toca tanto, o hay otra razón?

-Ayuda al espíritu. Mi vida hasta ahora ha sido buena, aunque en realidad sufrí bastante cuando más joven. Me crié con mi mamá porque mi padre se fue de la casa. Lo cierto es que vivimos con mi padrastro, él ha sido un buen hombre y está con nosotros, como le digo enfermo aquí en Río Negro.

El joven detalló que el resto de su familia la componen otros dos hermanos (una mujer y hombre). "Estamos saliendo adelante y es lo que cuenta. Ahora volveré hasta diciembre, porque me gustó el sur", expresó el joven, mientras volvía a tomar el instrumento con tal de sacarle las melodías que por al menos 15 días cautivaron a los rionegrinos.

"Amo esta naturaleza y el paisaje tan distinto al que tenemos en el desierto. Me invita a tocar la trompeta que es mi amiga inseparable"

Pablo Orrego"