Choque y auxilio médico I
Cuesta entender la actitud del personal del Sapu Marcelo Lopetegui, quienes en una actitud de falta de humanidad incomprensible, no prestaron atención a quienes habían protagonizado un accidente (Los Carrera esquina Angulo) el viernes en la noche, a tan sólo 20 metros de ellos.
Espero que la jefa del Departamento de Salud tome una medida ejemplar con todo el turno que trabajaba a esa hora, pero especialmente con el médico de turno. No hay excusas, hay momentos en los cuales los protocolos y recomendaciones de un servicio quedan en un segundo plano cuando se trata de atender personas agonizantes y heridas graves.
De paso, hago un llamado al Colegio Médico para que se pronuncie y le envíen a su colega una copia del juramento hipocrático.
Rodrigo Riquelme Muñoz
Choque y auxilio médico II
El viernes en la noche en nuestra ciudad hubo un accidente en el cual fallecieron dos personas, además de alrededor de 11 lesionados, en la puerta del Cesfam Marcelo Lopetegui. El único médico de dos que debían trabajar en ese turno se negó a prestar colaboración aduciendo que no podía abandonar su trabajo por el riesgo que corrían sus pacientes (situación muy lógica y aceptable).
Lo grave de esta situación da luces del funcionamiento de los centros de salud familiar y, no juzgando al medico que no acudió a su trabajo, creo que todos alguna vez hemos tenido inconvenientes en asistir a nuestros puestos, sino enjuiciando al sistema de administración de salud municipal que no tiene la capacidad de responder efectivamente a las necesidades de la población, dejando que sólo un médico quede a cargo de un gran porcentaje de las emergencias menores del sector céntrico y en un día y en un horario de alta complejidad.
Quienes acudimos a la salud pública sabemos de largas esperas por falta de médicos. Se necesitan más soluciones y menos asientos en las salas de espera.
Germán Cartes Oyarzo, vocero territorial de Revolución Democrática
Reclamo por fertilizantes
Agradezco a El Austral de Osorno el reportaje publicado el miércoles pasado, titulado "Agricultores locales denuncian falta de regulación en el mercado de los fertilizantes".
Para mi siembra de trigo y avena compré un fertilizante comúnmente llamado Súper Fosfato Triple (SFT) de una empresa importadora que me garantizó buena calidad de su producto a través de un importante distribuidor de Osorno. A estas alturas, y conocida la noticia, todos están en la misma situación. Como mediano productor yo mismo con mi padre hacemos las labores de regulación de máquinas y de siembra, por lo tanto, soy testigo directo de una situación.
Me fue imposible regular la máquina sembradora, se me hizo una pasta en el fertilizante, teniendo que aplicarla al voleo con el riesgo y costo adicional que eso significa. Dado el problema y la rabia que me significó mi situación, decidí sacar una muestra del fertilizante y enviarla al laboratorio, cuyo resultado le adjunto.
Grande ha sido mi indignación al revisar el resultado que me entregan: un triple que no es lo que compré, ya que tiene un 30% de solubilidad al agua y no tiene lo que todos entendemos debe tener, que al menos debe ser un 80% de solubilidad al agua. Como agrónomo entiendo perfectamente que este triple no es lo que necesita nuestro cultivo y no cumple con la composición y calidad que pagamos.
Esta la carta la escribo, porque nos sentimos engañados como cientos o miles de agricultores que confiadamente como nosotros lo hacemos, compramos nuestros fertilizantes e insumos sin tener certeza ni seguridad que lo que pagamos nos llega al campo correctamente. Esta anomalía y abuso debe ser materia para que el SAG o la Seremi de Agricultura le pongan coto al asunto y paren este engaño, dado el crítico momento que vivimos los agricultores con los bajísimos precios que recibimos por nuestra leche y trigo.
Si a eso le sumamos este engaño, la autoridad tiene la obligación de fiscalizar y controlar que se evite engañar a un vasto sector productivo palanca del desarrollo de la Región.
No más engaño, sólo solicitamos que nos vendan productos de calidad y que los fiscalizadores cumplan con su rol.
Pablo Wetzel B., ingeniero agrónomo y agricultor
Pensiones de Gendarmería
Creo que ni el más optimista de los chilenos íbamos a imaginar la gran cantidad de postulantes a Gendarmería después de conocerse las posibilidades de obtener a futuro una "reguleque" pensión de cinco palos y fracción o mejor dicho "durmientes". Hasta los presos están viendo las posibilidades de postular, ya que son conocidos.
Jorge Valenzuela Araya
