Diseñador osornino crea instrumento de percusión con metal reciclado
MÚSICA. Nelson Smith, de 35 años, logró un tambor cuyo sonido sirve para terapias de relajación.
Nelson Smith tiene 35 años y es diseñador gráfico de profesión, pero su creatividad y gusto por la música lo llevaron a crear un especial tambor fabricado con latas recicladas, al que llamó Küwü Drum, donde la palabra küwü en mapudungún significa mano y drum en inglés, tambor.
El instrumento musical se asemeja a un tambor suizo llamado Hang (drum), cuya forma es similar a la de un platillo volador (un ovni), pero en un formato más grande.
"Siempre me gustó el trabajo de manualidades, por eso cuando salí de enseñanza media tomé unos talleres de maestranza y ya de adulto al conocer el inédito instrumento suizo pensé cómo podría generar algo similar, porque tenía la experiencia de haber trabajado en talleres de metalurgia y aluminio", sostiene.
Creación y utilidad
Así, en el silencio de su taller, ubicado en dependencias del Museo de Artes Visuales Surazo (en calle Matta) nació hace dos años un nuevo instrumento musical, un tambor esférico hecho de metal reciclado, donde el formato es de un tambor refrigerante que utilizan las personas que trabajan en refrigeración y cuyo tamaño es de 25 centímetros de diámetro por 14 de alto.
El Küwü Drum destaca por su sonido envolvente que invita a la calma a quien lo escucha y si bien recién este año salió a la luz pública a través de su difusión por Facebook, el instrumento se ha distribuido por todo el país, desde Antofagasta a Punta Arenas, y los comentarios de la gente han sido tan positivos, que llenan de orgullo a Nelson Smith y lo motivan a seguir avanzando.
"Recalco que el tema es mucho más profundo que crear un producto comercial, su aporte está en que la gente lo ve como algo que sirve de ayuda. El instrumento invita a la calma a través de su sonido y para mí es muy satisfactorio lograrlo", sentencia.
En sus inicios hace dos años, Küwü Drum sólo lograba un sonido agradable y hoy se entrega afinado y en la escala musical que la persona quiera (incluido el color que es a elección del comprador).
Nelson Smith ha fabricado y vendido más de 50 instrumentos de percusión y ha podido enterarse por comentarios de sus clientes que hay personas que lo ocupan para empezar su día en jardines infantiles, otros para hacer terapias a mujeres prontas a dar a luz, o en la realización de meditaciones.
"Tengo amigos que lo involucran derechamente en la música hip hop, por ejemplo, porque da para todo, se puede incluir en cualquier estilo musical o en un momento en especial", detalla.
Küwü Drum está dentro de la línea de instrumentos como son los cuencos tibetanos, que se dan en las terapias alternativas y ahí es cuando cobra sentido el pensamiento de su creador, quien señala que éste nace como una reacción a la vida actual, donde a su juicio faltan momentos de armonía y equilibrio.
Transformación
"El pequeño tambor es algo que desde la basura se transformó para dar momentos de tranquilidad", señala el diseñador, quien destaca que su frecuencia vibratoria es de 432 hertz (frecuencia universal) y la recalca, porque es la frecuencia en la que todos vibramos y "eso hace que el instrumento sea parte de nosotros".
En su proceso de creación han participado muchas personas a quienes agradece su ayuda y no olvida que le han brindado ideas y materiales.
Según cuenta, el proceso de fabricación parte cuando el tambor o latón llega a sus manos, hay que limpiarlo, sacarle las partes que no sirven para luego pasarlo por un proceso de templado, lo que quiere decir que se le aplica calor y luego un golpe de frío, eso hace que el material quede tenso y entregue la vibración necesaria.
Corte, soldadura, limpiado y pintura es parte del proceso donde la afinación se hace al final.
La creatividad del diseñador gráfico osornino es tal, que a fin de año lanzará un Küwü Drum electrónico, que permitirá a una banda, por ejemplo, usarlo y amplificar su sonido.
Nelson Smith estuvo de cumpleaños ayer y como anhelo en esta nueva etapa que comienza está contribuir creando el Küwü Drum a mayor escala, para que muchas personas se beneficien de sus sonidos.
2 años nació el instrumento que está construido con metal reciclado y tiene la forma de un platillo volador.