"La regionalización es una urgencia porque no se puede seguir gobernando desde Santiago"
El conocido periodista y senador por Antofagasta, Alejandro Guillier, visitó la comuna para apoyar la candidatura de alcaldes y concejales de la Nueva Mayoría, en especial del Partido Radical, aunque ha desarrollado su carrera política, que comenzó en 2013, como independiente.
El ex panelista estable del desaparecido programa Tolerancia Cero ha sido un defensor de la regionalización, condición que lo ha catapultado para que su nombre se baraje como una eventual carta para ser candidato a la Presidencia de la República.
-¿Qué le parece que la Nueva Mayoría no inscribiera las primarias legales en la fecha que correspondía, siendo que han sido los principales en decir que 'primarias a todo evento'?
-Mi opinión personal es que se deben tener primarias para todos los cargos siempre y aunque el candidato esté ejerciendo el puesto. Porque eso permite también hacer una evaluación del desempeño ya sea del diputado, senador, alcalde, concejal, consejero regional, etcétera. El principio de primarias ayuda a democratizar y, por lo tanto, todos estos ripios, falta de fluidez o que en algunas comunas existan primarias y en otras no, es un proceso de transición lento.
-En algunas ciudades como Osorno se ha señalado desde el nivel central que no habrá primarias, ya que se le entrega el apoyo al alcalde en ejercicio, en este caso a Jaime Bertín, ¿qué le parece que esto ocurra?
-No soy presidente ni militante de partido político y observo el tema recomendando que siempre haya primarias. Los partidos tienen ritmos distintos y piensan en el antiguo precepto de que el que tiene mantiene, que se aplicó durante mucho tiempo y que me parece va en retirada. Yo estoy por renovar, pero no por una decisión administrativa, sino porque el electorado tiene la oportunidad de conocer más gente.
- ¿De dónde provienen esas nuevas opciones?
-Al llevar más candidatos se involucra más gente en la posibilidad de ser elegido y eso ha llevado a los partidos a buscar mucha gente independiente o que viene de los movimientos sociales, incluso que muchas veces no tienen tradición política, pero sí son muy conocidos en sus comunidades. Eso también democratiza a la clase política, que está haciendo una transición interesante al abrirse a más jóvenes y bastantes mujeres.
-¿Le interesa ser Presidente de Chile?
-No conozco ningún político que no sueñe con ser Presidente del país. Yo empecé a recorrer Chile porque andaba promoviendo la descentralización. Estoy trabajando para ser un buen senador, pero si llegara al convencimiento que podría ser un buen aporte y la circunstancia se da para un tipo de liderazgo como el mío, uno no se puede negar. Pero no estoy en campaña.
Regionalización
-¿Qué le parece la elección de intendentes por votación el próximo año? ¿ Será un cargo con atribuciones (económicas y decisión en la Región) o sólo un cargo político más?
-Mi visión es que en la clase política en general hay gente que se ha convencido que la regionalización es una urgencia, porque no se puede seguir gobernando desde Santiago. Cada Región tiene que ser capaz de mirar a largo plazo y anticiparse a los conflictos y si tuvieras un intendente empoderado con un Consejo Regional también con sus facultadas claras, además de su rol fiscalizador, por ejemplo, a Los Lagos no le hubiera pasado la crisis que enfrentó por la marea roja. Creo que tener un intendente empoderado es una necesidad, y por lo mismo, hay un debate interno no sólo en el gobierno, también en la clase política entre los que son regionalistas y aquellos que lo ven con cierto temor.
-¿Es necesario un cambio de Constitución en Chile?
-Los cambios en el país ya se están produciendo al margen de la Constitución, por la razón que cuando la ciudadanía asume como sentido común algo, pasa a provocar un cambio. Se debe ir a un ordenamiento constitucional que refleje el nuevo Chile y el cambio más cualitativo que veo es que si el siglo XX fue de la razón de Estado o los partidos, el siglo XXI es mucho más de los ciudadanos y las organizaciones sociales. La mejor prueba de eso es que ninguna reforma que se está discutiendo en Chile proviene de ningún partido político, todas provienen de los movimientos sociales.
"El cambio más cualitativo que veo es que si el siglo XX fue de la razón de Estado o los partidos, el siglo XXI es mucho más de los ciudadanos y las organizaciones sociales". Alejandro Guillier Senador por Antofagasta