Apoderados protestan por cierre de escuela hospitalaria
CLAUSURA. El establecimiento que funciona en el recinto cesará sus funciones por no tener condiciones adecuadas.
Con una manifestación en la entrada de la Urgencia del Hospital San José, un grupo de alrededor de 25 personas, entre padres, apoderados y alumnos, protestó por el cierre de la escuela que funciona al interior del recinto y que entrega clases a niños que son pacientes internados en pediatría, así como a otros en tratamiento ambulatorio.
Así lo afirmó la presidenta del centro de padres de la escuela, Paola Ortega, quien señaló que por tratarse de niños con trastornos de salud no son recibidos por otros establecimientos. "Es igual que ir a otro colegio, salvo que aquí la atención es personalizada", dijo.
La directora de esta escuela, que es particular subvencionada, Karina Doepking, indicó que el 30 de octubre recibieron la petición del espacio que usan, que es una dependencia de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
"Cuando llegamos funcionábamos en dos salas y luego nos derivaron a este espacio que es mucho más reducido por la construcción del hospital", explicó.
La directora agregó que desde la administración anterior se les informó que habría una licitación para adaptar un espacio en el hospital para ubicar a la escuela, donde incluso arquitectos visitaron el lugar.
Entre tanto, la directora del hospital, Verónica Wall, indicó que el cierre de la escuela se debe a que el plantel es de particulares -con los que se finaliza un contrato el 31 de diciembre de 2015- que ocupan dependencias destinadas a salud y que funciona en un lugar inadecuado como lo es la UCI, por lo que los niños están expuestos a infecciones, aunque sí aseguró que las clases para los niños internados en pediatría continuarán realizándose.
"Son niños felices que conversan, corren y no necesitan estar dentro del hospital, donde además hay pacientes infectados", señaló Wall.
15 alumnos pacientes ambulatorios estudian en la escuela, cuya sala será destinada a procura de órganos.