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Luego de un paro de actividades que se prolongó por más de dos meses, la Universidad de Los Lagos retomará este lunes sus actividades académicas, lo que obligará a comprimir el primer semestre inconcluso.
Así se informó desde la Rectoría de las casa de estudios, donde ayer por la tarde se realizó una asamblea a la que se convocó a toda la comunidad estudiantil, además de los representantes de cada carrera y los miembros de la federación.
Según este nuevo calendario, el segundo que se diseña tras una fallida vuelta a clases el pasado 20 de julio, el semestre se retoma este lunes 10 para cerrarse el 4 de septiembre.
La ULagos era una de las tres universidades en el país que seguía paralizada y con algunas dependencias en toma.
Calendario definitivo
Luego del término del primer semestre, los alumnos comenzarán inmediatamente el segundo el lunes 7 de septiembre y las clases finalizarán el 23 de diciembre. Ahí se dará paso a los exámenes finales el 28 de ese mes hasta el 13 de enero, para cerrar definitivamente el año el 15 de enero con la entrega de las actas de notas.
Magali Quintana, directora de Docencia y Pregrado de la ULagos, se refirió a la alteración del año académico y explicó que en lo que resta del período de asignaturas del año 2015, "cabe destacar que éste fue aprobado en reunión de Consejo Universitario realizado el día de ayer (viernes), con participación de representantes de todos los estamentos, incluidos los estudiantes. Se deberá acortar el primer semestre y acotar el segundo", expresó.
Tiempo, calidad y gastos
Según el director de Desarrollo Estudiantil de este plantel, Raúl Acosta, esta forma de cerrar el semestre resulta perjudicial para los estudiantes, ya que los contenidos faltantes deben comprimirse en menos de un mes, período donde además se incluyen pruebas y exámenes finales.
A esta situación debe agregarse que muchas de las asignaturas que se imparten son requisitos para continuar con una siguiente y donde además se debe contar con una mínima base de conocimiento para poder comprender la materia, lo que en la práctica no será lo mismo para estos alumnos que deberán internalizar los contenidos en un corto tiempo.
Acosta agregó que una de las consecuencias que deberán afrontar los alumnos al volver a clases luego de dos meses es la pérdida de becas de alimentación, cuyo plazo para la repostulación vence este 12 de agosto, pero para ello se debe tener el semestre cerrado, ya que uno de los requisitos que solicita la Junta de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb) es el promedio semestral de cada alumno.
El académico señaló que mil 500 estudiantes de la ULagos cuentan con ese beneficio.
Otro de los problemas derivado de esta prolongación del año académico se manifestará en el mes de enero, ya que las becas de arancel y las alimenticias sólo cubren de marzo hasta diciembre, como también opera así la locomoción colectiva que cobra una tarifa de estudiante solo hasta diciembre.
"Los costos que el paro generó a la universidad son varios millones de pesos y para sus familias hay un costo enorme que deberán asumir", señaló Acosta.
Fin a la movilización
Camila Hernández, presidenta de la Federación de Estudiantes de la ULagos (Feul), expresó al término de la movilización que "fue un proceso exitoso que conllevó mucho trabajo de ambas partes y llegó a un buen resultado. Esperamos ahora que se vayan cumpliendo los acuerdos".
La dirigente estudiantil explicó además que a pesar de que no se logró cumplir con todo el petitorio, los principales acuerdos alcanzados son una rebaja de hasta un 45% en la matrícula. A los profesionales que dictan cátedra en salud se les exigirá experiencia en docencia.
Además, habrá participación estudiantil en términos de investigación, vinculación con el medio e innovación curricular y se realizará un congreso de análisis de la situación universitaria.