Cuatro niños sufren asfixia tras inhalar gas desde un brasero
emergencia. Tres de ellos pasaron la noche en el Hospital San José, pero están fuera de riesgo. Experto recomienda ventilar los espacios al usar esta calefacción.
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Los dolores de cabeza y las mejillas coloradas que presentaron la tarde del martes cuatro niños al interior de una vivienda en calle Lago Nahuelbuta, en Villa Parque Nacional de Rahue Alto, fueron una señal clara para la madre de los pequeños de que algo extraño ocurría con sus hijos. Por ello, decidió llevar a sus dos hijas de 11 y 9 años hasta el Hospital Base San José, ya que presentaban un cuadro de asfixia tras inhalar monóxido de carbono que emanaba desde un brasero que utilizaban para calefaccionar la vivienda.
Priscila Dos Santos, de 19 años, hermana de los menores afectados por el gas y quien trabaja de cajera en un céntrico supermercado, señaló que la doctora que atendió a las dos hermanas pidió que para prevenir alguna emergencia posterior, los otros dos hermanos de 7 años y 6 meses sean llevados al recinto médico para un chequeo.
"Vino la ambulancia a buscar a mis otros dos hermanitos y por la noche sólo regresó mi mamá con el bebé, ya que según el informe médico afortunadamente no tenía complicaciones. Mis otros tres hermanos fueron tratados con oxígeno y durante la mañana de hoy (ayer) fueron dados de alta sin lesiones", indicó.
Según el relato de la joven, su madre debió encender el brasero debido a que la parafina del calentador que usan habitualmente se había acabado. Pero por la hora y distancia era difícil salir a comprar el combustible.
"Lamentablemente el brasero nos jugó una mala pasada, por suerte mis hermanitos están bien", añadió Priscila Dos Santos, quien dijo que los menores estuvieron internados en la unidad de Pediatría del Hospital San José.
ventilar
Víctor Contreras, docente del área de procesos industriales de Inacap sede Osorno, expresó que como la gente necesita calefaccionar sus viviendas en esta época del año, recurren a diversos medios para obtener calor, sin embargo muchas veces desconocen que calentar la vivienda conlleva riesgos.
"Estamos en el sur y acá es común tener la estufa a leña o combustión lenta encendida, sin embargo hay personas que utilizan calentadores a gas o a parafina, incluso hay quienes optan por los braseros. Para ello es importante considerar algunas medidas de precaución, como ventilar constantemente el espacio donde se encuentran estos artefactos", dijo Contreras.
El experto agregó que todo tipo de combustión libera gases y el más peligroso para la salud de las personas es el monóxido de carbono. Se trata de un gas invisible e imperceptible a la visión y olfato; e ingresa al organismo por las vías respiratorias.
"Por ello es necesario mantener siempre renovado el aire en la zona donde están los calefactores, para así evitar casos de personas intoxicadas", comentó Víctor Contreras.
El docente de Inacap recomienda que jamás hay que dejar encendido un elemento calórico que esté en proceso de combustión en una habitación con puertas y ventanas cerradas, "hay que permitir que entre el aire y se renueve el existente", señaló.
"Y el brasero debe ser encendido en el exterior de la casa, para que los carbones tengan una buena combustión y una vez que éstos se encuentran totalmente quemados es posible entrar el brasero a la casa, aunque siempre con una buena ventilación de la vivienda o habitación", dijo.