Científicos del Cecs de Valdivia descubren lago subglacial en territorio antártico chileno
investigación. Se trata de un cuerpo de agua de a lo menos 18 kilómetros cuadrados, ubicado a 2,6 kilómetros bajo el hielo, a 10 grados del Polo Sur.
gpavezv@australvaldivia.cl
Un hallazgo histórico realizaron cuatro científicos del Centro de Estudios Científicos (Cecs), de Valdivia, quienes confirmaron la existencia de un lago subglacial, el que está ubicado en la Antártica Chilena.
Se trata de un cuerpo de agua de al menos 18 kilómetros cuadrados -unas dos veces el tamaño del lago Neltume, en Panguipulli- que está ubicado a 10 grados del Polo Sur. Fue encontrado gracias al trabajo de los científicos del laboratorio de Glaciología del CECs Andrés Rivera, José Uribe, Rodrigo Zamora y Jonathan Oberreuter. El hallazgo del lago, bautizado como "Cecs", fue publicado esta semana en la revista científica Geophysical Research Letters.
En dicho artículo se detalla que el lago se encuentra en la parte central de la cubierta de hielo Oeste de la Antártica, a unos 4.400 kilómetros de Valdivia.
hielo
También se explica que el lugar está "en una zona divisoria de tres grandes glaciares de la Antártica Occidental, donde nacen grandes corrientes de hielo. Por lo mismo, se encuentra en un situación de baja perturbación, donde el movimiento del hielo es casi inexistente".
Esta es una de las características más importantes del hallazgo, debido a que lo convierte en un lago encapsulado. Lo que a juicio de los investigadores "favorece la hipótesis de que en el caso de albergar vida, ésta se habría desarrollado en condiciones de extremo aislamiento".
De acuerdo a los antecedentes proporcionados por el Cecs, la historia del hallazgo se remonta al verano del año 2014, cuando los científicos participaban en una travesía por la Antártica Occidental, a bordo de la estación móvil "Cecs 1".
extensión
En aquella época, específicamente el 21 de enero, las mediciones del radar detectaron la presencia de un cuerpo de agua a aproximadamente 2,6 kilómetros bajo la capa de hielo, por lo que se realizó un primer estudio utilizando un radar de penetración de hielo, que confirmó lo detectado en primera instancia.
Posteriormente, el equipo debió esperar hasta este verano para volver al lugar y realizar una labor de construcción de mapas más precisa, para analizar en detalle los datos encontrados.
Dicho análisis permitió la publicación del artículo en la revista especializada.
ubicación
El lago subglaciar Cecs se encuentra ubicado a 160 kilómetros del glaciar Unión, lo que según los científicos a cargo de la investigación lo convierte en un lago "de acceso especialmente simple desde el punto de vista logístico".
Además se destacó por parte del Cecs que su cercanía con el mencionado glaciar es muy beneficiosa para exploraciones futuras, debido a que en la masa de hielo pueden aterrizar aviones de gran envergadura, lo que según explicaron "contribuyó significativamente a que su descubrimiento se hiciese directamente por exploración terrestre".
El científico del Cecs y miembro de la expedición que descubrió el lago subglacial en la Antártica, Andrés Rivera, destacó que el hallazgo "es importante debido a la posibilidad de descubrir formas de vida que se desarrollaron en un ambiente extremo".
Rivera, quien es geógrafo de la Universidad de Chile, indicó además que "este es un lago que por sus características es muy probable que haya estado aislado de la atmósfera por cientos de miles de años, lo que implica que tiene muy poco intercambio de sedimentos, de materia orgánica, etc., con su entorno y la atmósfera"-
Explicó que "por lo tanto, si es que existen formas de vida en un ambiente con condiciones térmicas bajo los 0 grados éstas son muy extremas para poder soportar la presión y la temperatura. En ese sentido son formas orgánicas que no conocemos. No vamos a encontrar animales, pero si formas de vida microscópicas".
"La importancia de esto, es que explorar un lago como este es prácticamente como ir a otro planeta a ver qué formas de vida pueden existir", agregó.
Respecto al futuro de la investigación aseveró que "se debe investigar a través de una perforación que no sea invasiva. Sin contaminación como combustibles o microorganismos. Entonces lo primero es hacer más estudios para saber la profundidad del lago y luego perforar lo que requiere del diseño de un taladro que cumpla esas condiciones".