Curiosidad ha generado en la comunidad osornina la llegada de numerosas bandadas de loros Choroy al radio urbano.
Los vecinos del sector oriente de la ciudad, específicamente en la avenida Diego de Almagro, la Villa Los Aromos, Villa Universitaria y Las Quemas, señalan que las aves nativas llegaron hace unas semanas a pernoctar en los árboles que hay en dichos barrios.
Moisés Yefe, jardinero de la Villa Los Aromos, señala que las aves llegan por las tardes a dormir en los árboles y se van de madrugada; y más que provocar molestias a los residentes del sector, genera curiosidad y asombro sobre por qué ocurre el fenómeno.
Carmen Cuevas, vecina de avenida Diego de Amagro, explicó que la llegada de estas aves se remonta a unas semanas atrás. "Hace unos días he visto bandadas gigantes frente a mi casa, no molestan, pero sí meten mucho ruido", dice.
El médico veterinario Jorge Carbonell explica que el loro Choroy es un ave del tipo Psitácidos, habita en la zona sur del país, además de Argentina, y es una de las aves más longevas, ya que puede llegar a vivir 50 años.
Llegan a sectores urbanos en busca de alimentos, su dieta se basa en semillas, granos y frutos, anidan en árboles y bosques evitando a depredadores como el halcón, aguiluchos, zorros y visones. Y generalmente se alimentan a no más de 20 kilómetros del lugar de nidificación.
Miden entre 20 y 40 centímetros considerando el plumaje, se reproducen en primavera y verano, y en cada ciclo reproductivo ponen entre 2 y 4 huevos.
posibles daños
Si bien estas aves no representan un peligro para la población más allá de los molestos ruidos que pudiesen provocar, "no obstante, en el área agrícola o forestal son bastante dañinos, pues se alimentan de cortezas, brotes y frutos de los árboles, por lo tanto no sólo utilizan los nutrientes que la naturaleza les entrega sino que también destruyen flora nativa", indica Carbonell, agregando que una forma de alejarlos es a través de tiros de salva.
El médico veterinario asegura que una de las formas de ahuyentarlos, y que generalmente se usa en el campo o sectores residenciales, "es colgar en los árboles latas o tarros, de modo que el viento los golpee y se provoque un sonido que aleja a las aves".
Además, el especialista explica que existe un repelente para aves pero que debido a las características de anidación de los loros no causa efecto, pues se rocían como micro piedrecillas que se aplican en las superficies, lo cual en los árboles se hace imposible.
En cuanto al daño que podrían provocar al ser humano, el especialista señala que eventualmente son transmisores de algunas enfermedades respiratorias y oculares, particularmente por las bacterias de sus fecas, las que provocan enfermedades como neumonías o neumonitis.
tráfico y tenencia
Desde el Servicio Agrícola Ganadero (SAG), el director regional, Andrés Duval, indicó que hasta el momento no han recibido denuncias de daños provocados por loros Choroy, al contrario, las denuncias se concentran en el tráfico de dichas aves.
"En la Región es recurrente el tráfico de estas aves, en comunas como Purranque y Río Bueno, además en muchas ferias libres se comercializan como mascotas", dijo.
Es por ello que en el SAG toman conocimiento de los sectores para verificar la especie y los posibles daños.
Es importante destacar que el loro Choroy es una especie endémica (nativa de Chile) y que su caza o captura está prohibida. Comúnmente habita en coihues, robles, arboledas de manzanos y se puede encontrar de Valparaíso a Coyhaique.
Según Duval, esta especie es la más probable que llegue al radio urbano, debido a la falta de alimento en el medio rural. El loro Choroy es considerado como una especie vulnerable y su existencia, independiente de la magnitud de las bandadas, no se define como plaga.