Floristas duermen en sus locales en espera de visitantes a cementerios
comercio. Rosas, claveles y calas son las flores más solicitadas por quienes visitan a sus difuntos en esta festividad católica. Las locatarias traen sus productos desde Santiago y Ecuador, el que limpian y mantienen en agua, a la espera del arribo de miles de personas a contar de mañana a los camposantos. Por ello, han sumado a familiares para cubrir la atención de sus locales.
Rosas, claveles y calas son las principales flores que requieren los osorninos que llegan hasta los tres cementerios de la ciudad, además de los dos parques, uno ubicado en el camino al mar y otro en Cañal Bajo. Es por ello que las floristas se han preparado desde la semana pasada para contar con el stock suficiente para recibir a los miles de visitantes que llegarán desde mañana a visitar a familiares y amigos en la festividad católica de Todos los Santos y Difuntos.
Trabajo en familia
La mujer de 61 años lleva la mitad de su vida entre pétalos y capullos. Ayer, mientras separaba los paquetes de flores que le habían llegado muy temprano en la mañana, contó que durante estos días toda la familia colabora en el trabajo, por lo que se turnan y pasan la noche haciendo cojines, coronas y ramilletes en el local.
"Es un trabajo familiar, por eso todos ayudan en todo. Pasamos las noches haciendo arreglos para que al otro día no falten y podamos atender con más calma, aunque siempre hay alguien que queda armando", dijo la madre y dueña del local 4 de la pérgola.
De hecho, desde ayer y hasta el domingo las jornadas de trabajo se extienden durante todo el día y sólo duermen un par de horas cada uno, sentados en alguna parte del local, donde también aprovechan de cuidar sus productos.
sólo mujeres
"Aquí somos puras mujeres, los hombres ayudan a cargar y descargar las flores, pero nada más, porque las 'queman'", comentó Marión entre risas.
Para esta festividad se prepara durante todo el año e invierte cerca de $2 millones en flores y así puede contar con la variedad y cantidad suficiente para sus clientes. "Por suerte nosotros ya tenemos nuestros clientes, porque hay algunas personas que llegan en esta fecha a vender acá y eso hace que perdamos algunas ventas, pero nuestros clientes vienen igual", asegura la florista.
Para esta ocasión compró cerca de 2 mil 400 claveles y más de mil rosas, además de la misma cantidad de calas de la zona, por eso debe trasladar algunos de sus productos a su casa y así no tiene que quedarse en el local.
"A la gente le gusta mucho las calas y rosas. En esta festividad buscan algo especial para sus familiares", explicó Marión, quien cambia el agua de las flores varias veces en el día para mantenerlas frescas y en buen estado.
También rodeada de mujeres en el Cementerio Alemán, Silvia Soto trabaja junto a su madre y dos colegas en los únicos puestos de calle Los Carreras. Explica que los clientes de ese sector prefieren los arreglos, por lo que casi no dejan flores sin agrupar.
Precios
Por eso mismo, Guillermina Paredes del local 2 de Rahue restringió la cantidad de productos que compró este año, y dejó espacio sólo a las más vendidas: claveles, rosas y calas.
"La caja de 400 claveles nos cuesta $75 mil, por lo que cada clavel sale como $200 y nosotros vendemos paquetes de 3 en mil, pero vienen con verde que nos vende una señora de la costa", contó Guillermina.
La florista de Rahue asegura que hay flores que no se venden como las lilas y jopos, aunque depende del lugar y que algunas están de moda como las rosas. "Antes las rosas se usaban más como regalos del Día de la Mamá o celebraciones, pero ahora gustan mucho para el cementerio", recalcó.
En un mes normal, cuenta Guillermina, invierte alrededor de $60 mil semanales, pero para esta ocasión hizo un esfuerzo y reunió unos $500 mil para comprar flores.
"Las otras semanas del año son lentas. Los viernes, sábados, domingos o festivos son los mejores días, pero el resto de la semana no pasa nada. Ahora la gente mayor es la que viene más al cementerio, los demás no se acuerdan mucho, por eso hay que hacer un esfuerzo y juntar platita para poder esta fecha", afirmó.
Principales son los claveles, rosas, lirios, camelias. Se utilizan para los diferentes arreglos y vienen de la zona norte.
Decorativas están los alelí, statice y lilas, las que dan forma y abundancia a los ramos.
Verdes hay de diferentes tipos y provienen de zonas costeras. Otorgan contraste a las decoraciones.
8 mil claveles es la cantidad que compró la florista de Rahue Betsabé Serra, por lo que deberá turnarse y pasar la noche en su local armando los arreglos que venderá.
Rosas de Ecuador calas y claveles son las variedades más vendidas en Osorno, donde los precios fluctúan desde los mil pesos hasta los 20 mil las coronas a pedido.
31 de octubre hasta el 2 de noviembre los cementerios de la ciudad atenderán desde las 8 a las 20 horas en horario continuado. Las floristas estarán desde las 7 de la mañana.