El mes de agosto, Natalia Espinoza y Jonathan Arteaga se consiguieron la sede de la Villa Alto Osorno donde viven, para realizar un bingo que les permitiera obtener un ingreso extra, destinado a la compra de los 400 pañales y seis tarros de leche especial que utilizan al mes sus tres pequeños retoños, los que el pasado 8 de octubre cumplieron cinco meses de vida.
Pensión de gracia
Dicho aporte fue aprobado ayer, por lo que esperan recibir el primer pago de aproximadamente $304 mil mensuales a contar de mediados de noviembre.
"Nunca pensé que iba a ser tan rápido, porque cuando el gobernador nos visitó cuando nacieron los trillizos, dijo que se podía demorar hasta un año en otorgarse, pero por suerte salió ahora y vamos a tener otra entrada", comentó Natalia. La joven explicó que no todas las personas que optan al beneficio lo obtienen, ya que estudian cada caso en particular.
familia
Pasaron de una familia de tres integrantes a seis, por lo que los gastos y las tareas del hogar se multiplicaron.
Natalia cuenta que su madre Elizabeth les ayuda mucho, ya que pasan la mayoría de los días juntas y se acompañan.
"Entre los 18 cambios de pañales, 16 mamaderas, tiempo de leche materna, lavado, secado, almuerzo y baños, apenas me alcanza el tiempo para hacer otras cosas durante el día. Por eso cuando me toca ir al centro, mi mamá sí o sí me acompaña", relata Natalia.
Jonathan, en tanto, llega del trabajo después de las 19 horas. Pasa un tiempo con la familia y ayuda en lo que pueda hasta la medianoche, cuando los trillizos y Helen duermen y al fin pueden descansar.
Agrega que los niños son muy pacientes y que afortunadamente pasaron un buen invierno. La única que estuvo más delicada fue Sofía, la más pequeña, quien pasó hospitalizada por una semana.
"Son niños pacientes, saben que hay otros dos que esperan, no lloran mucho y son regalones", cuenta Natalia, quien detalla que desde que nacieron han aumentado 5 kilos su peso.
Básicos de luz, agua, gas y leña se han incrementado los últimos meses.
Pañales, leche para prematuros, ropa y útiles de aseo son los productos que más requieren los trillizos.
6
kilos 200 gramos pesa la más pequeña, Sofía, mientras que Tomás y Bianca ya alcanzan los 6 kilos 700 grs.
400
pañales mensuales requieren los trillizos, los que equivalen a un valor de $100 mil.