Un estudio afirma que consolarse con comida no funciona
Sicología. Unos científicos estadounidenses desmienten los efectos de los alimentos "gratificantes" en el estado de ánimo.
Comerse un chocolate o tomarse un helado para aliviar la pena o subirse el ánimo es una acción que más de alguno ha hecho en momentos de tristeza o mal humor. Pero una investigación estadounidense encontró que la utilidad de este hábito es nula y no mejora el ánimo de las personas.
La investigación fue realizada por la Universidad de Minnesota y se basó en el análisis de un grupo de estudiantes. Todos ellos, estando en un principio de mal humor, se sintieron igualmente mejor después de consumir un alimento que ellos consideraban "reconfortante", cuando ingirieron comidas que no consideraban reconfortantes y después de comer nada. Es decir, comer o no comer un alimento que creemos que nos subirá el ánimo no hace mucha diferencia, según los autores.
En opinión de los académicos, estos hallazgos podrían ayudar a animar a las personas a comer de forma más saludable.
Durante el estudio, los investigadores les pidieron a 100 estudiantes universitarios que señalaran sus comidas favoritas, en especial a aquellas que suelen consumir cuando se sienten mal o tristes con el fin de "consolarse". A esas comidas, los responsables del estudio llamaron "comidas reconfortantes".
Luego indujeron a los estudiantes a sentirse tristes haciéndolos ver extractos de películas dramáticas.
Después alimentaron a la mitad de los participantes con sus comidas favoritas para subirse el ánimo, mientras que la otra mitad consumió comidas que si bien les gustaba, no las consideraban "reconfortantes".
Una vez que los estudiantes terminaron de comer, los autores del estudio les preguntaron a los voluntarios cómo se sentían. Resultó que todos se sentían mejor, independientemente de lo que habían comido.
Los expertos repitieron el mismo experimento, excepto que esta vez la mitad de los estudiantes consumió comida que usaban para consolarse y la otra mitad no comió nada.
Después de unos pocos minutos, ambos grupos se sintieron igualmente mejor, por lo que los investigadores concluyeron que la comida de consuelo no tuvo impacto en el estado de ánimo.
"Aunque la gente piensa que las comidas 'reconfortantes' le entregan beneficios para su estado de ánimo, las comidas 'reconfortantes' no les entregan más beneficios que los proporcionados por los otros alimentos (o no comer nada)", explicó la autora principal del estudio, Traci Mann.
Contexto
Además, los investigadores no pudieron observar los contextos reales en que las personas suelen consumir comidas "reconfortantes", y opinaron que quizás parte de ese "consuelo" viene del hecho de ir a un local o comercio y adquirir el producto.
Sin embargo, los expertos dijeron que los resultados no les sorprendían, debido a que los cambios en el estado de ánimo son sicológicos y poco pueden hacer las comidas para que se produzcan esos cambios.
David Levitsky, profesor de nutrición de la Universidad de Cornell, dijo al medio NPR que "tendemos a buscar un solución mágica para nuestros problemas. La idea de que nos podemos sentir mejor por simplemente consumir ciertas comidas es muy convincente, pero en la realidad, sentirse mejor no tiene que ver con la comida misma".
El académico agregó que no necesariamente requerimos alejarnos de la pizza o los helados cuando nos sentimos tristes, pues en su opinión, estos alimentos no produce daño, "a menos que los comas en exceso, ingieras constantemente comida para evitar hacer frente a grandes problemas".
El estudio fue publicado en la revista especializada Health Psychology.