Hace unos días, la ministra de Cultura Claudia Barrattini informó que en Arica residen unos diez mil descendientes de esclavos negros.
Señaló que serán considerados en la consulta a los colectivos indígenas sobre el futuro Ministerio de Cultura.
Es cierto que hay muchos descendientes de negros en el Norte Grande, zona que perteneció a Perú y Bolivia hasta 1883. Más que un grupo étnico específico, son personas mestizas, y para establecer su número se requiere un estudio muy acucioso y con diversas fuentes.
También en el resto del país hay bastantes descendientes de esclavos, pero cuyo número no superó el 10% (censo de 1813). Estos fueron asimilados en sucesivo mestizaje con indígenas y criollos. De esto dan cuenta estudios genealógicos de familias fundadoras, con descendencia vigente en diversas zonas del país.
En Colchagua, la familia Celis, que entre negros y mulatos tuvo 16 esclavos, los que llevaron el apellido Celis.
También los Arriagada, dueños de la estancia La Candelaria, que poseían 23 esclavos, detallados en testamentos y capitulaciones matrimoniales. En La Serena, de Juana Godoy, hija de esclavos negros de la familia Godoy, es sexta nieta paterna de Lucila Godoy Alcayaga, más conocida como Gabriela Mistral.
De la familia Ureta, cuyo fundador fue tesorero en Arica y encomendero de Apoquindo, Juan de Ureta fue dueño de varios esclavos y padre de Gabriel de Ureta, mulato libre (1665). El mayor propietario fue la Orden Jesuita, que al momento de su expulsión de Chile, en 1767, tenía 1,190 esclavos en sus haciendas y colegios, vendidos en los remates de sus posesiones. También en Valdivia y Osorno hubo esclavos negros y mulatos en el siglo XVI, y desde la repoblación de ambas ciudades hasta la abolición de la esclavitud en 1823.
Un estudio del padre Guarda contabiliza 68 esclavos en Valdivia, y entre los propietarios con casas y tierras en Osorno menciona a Manuel Fernández, Manuel Feliú de Olorra (I Superintendente), Juan José Moreno (gobernador), Tomás de Alvarado, Pablo Cayetano Masenlli y Manuel Vázquez Alonso. Seguros ancestros de negros tienen la cantante Katherine Orellana y la ex diputada Carmen Lazo.