Desde el 15 al 25 de este mes se llevará a cabo en Doha, Qatar, el oeste de Asia, la trigésima octava sesión del Comité de Patrimonio Mundial de la Unesco, ocasión en donde se revisará el estado de conservación de los sitios de patrimonio mundial, como son Valparaíso y Chiloé en el caso de nuestro país.
Para tales efectos viajará una delegación chilena encabezada por el recién asumido secretario ejecutivo del Consejo de Monumentos Nacionales, José de Nordenflycht, más otros profesionales de esta repartición pública, a los que podrían sumarse también otros desde la Cancillería.
En la oportunidad, la convención internacional tratará el estado de las iglesias de Chiloé, en la Región de Los Lagos, específicamente la situación del templo San Francisco de la ciudad de Castro, por la instalación del mall Paseo Chiloé del holding Pasmar S.A., cuyo borrador de resolución que el Centro de Patrimonio Mundial ha sometido a la consideración de la próxima asamblea anual, amenaza con que estos templos sean inscritos en la Lista de Patrimonio de la Humanidad en Peligro.
Ante este escenario, el presidente del Colegio de Arquitectos de Chile A.G., Sebastián Gray, aventuró que espera que el sitio de Chiloé, que lo componen 16 iglesias, no ingrese a la nómina de patrimonio en peligro y pueda el país llevar a cabo las medidas paliativas sugeridas por la misión de expertos que Icomos realizó tras su visita al Archipiélago en diciembre del año pasado.
'Espero que no se ponga en riesgo la declaratoria de las iglesias, para lo cual el Estado de Chile debería garantizar el cumplimiento de las recomendaciones de Icomos, especialmente en el sentido de tomar medidas paliativas al impacto negativo del mall de Castro, incluyendo achicar el volumen y rebajar su altura', expuso el profesional.
A ello sumó el académico que 'hay que dar señales claras de que no se volverán a cometer errores tan perjudiciales como construir un edificio de ese tamaño, en ese lugar y con ese nivel de atropello por los valores arquitectónicos y paisajísticos locales. Esta debe ser una responsabilidad compartida entre las autoridades locales y los gestores inmobiliarios'.
Por su parte, Patricio Herman, presidente de la Fundación Defendamos la Ciudad, aseguró que el sitio patrimonial isleño correrá el mismo destino de la ciudad de Dresden en Alemania.
'En el año 2009 esa hermosa ciudad, conocida como la Florencia del centro de Europa, perdió el status de Patrimonio de la Humanidad por motivo de la construcción del puente Waldschlößchen que cruza el río Elba', mencionó el dirigente.
'Recordemos que los acuerdos de la Unesco no son vinculantes con la institucionalidad chilena, más todavía si las autoridades locales de Castro apoyan esa edificación que está pronta a terminarse. Sabemos que el caso está radicado en los tribunales pero también que la jurisdiccional es lenta para resolver', puntualizó Herman.