Ricardo Cortés
La demora de los procesos administrativos en el Gobierno Regional para la entrega de recursos mantiene en jaque los trabajos de restauración de las iglesias Patrimonio de la Humanidad Nuestra Señora de los Dolores de Dalcahue y Nuestra Señora del Rosario de Chelín en Castro.
Incluso, cerca de 50 personas que trabajan en la Fundación Amigos de las Iglesias de Chiloé recibieron una carta de aviso dando cuenta del término de las funciones, ya que los recursos disponibles se terminaron, lo que obligará a fin de mes a dejar las obras prácticamente abandonadas.
Así lo reconoció con pesar el director ejecutivo de la Fundación Amigos de las Iglesias de Chiloé, Cristian Larrère, quien explicó que la situación es insostenible por más tiempo y pese a que con el obispo Juan María Agurto ha realizado una serie de gestiones, los fondos solo estarían disponibles en un par de meses.
"Teníamos el convenio firmado y nos faltaba la transferencia, y apostando a que los recursos estaban por llegar se estaban realizando estudios de mecánica de suelo, visitas técnicas y cierre perimetrales en Chelín", señaló el ingeniero comercial, sumando que "llegó febrero y nos dimos cuenta de la omisión de un documento solicitando el traspaso".
Antes del cambio de Gobierno se iniciaron las gestiones para lograr la firma del traspaso, lo que tampoco se concretó, por lo que la entrega de fondos aún sigue en compás de espera.
"Aunque previmos esta situación y se había dejado de comprar insumos mientras se concretaba el traspaso, ya no podemos continuar los trabajos, lo que es lamentable por el daño patrimonial que esto puede ocasionar a las iglesias, sobre todo a Dalcahue que está destapada", afirmó el director ejecutivo de la Faich.
El jueves la fundación dio aviso formal a sus trabajadores que su vínculo contractual termina en 30 días, situación que fue adoptada para no incrementar la "crisis" en la que se encuentra la institución.
De esta forma, con un 30 por ciento de avance quedarían las obras de la iglesia de Dalcahue, aunque al descubierto, mientras que en Chelín solamente se alcanzó a terminar algunos estudios y el cierre perimetral.
"Aquí hay un tema administrativo que no funcionó bien. Nosotros sabemos que el compromiso de las autoridades está. Nosotros hemos hecho todo lo posible para solucionar este tema y hemos trabajado bien", aseguró el profesional, sumando que "lo que pasa es que no hemos tenido una contraparte en este proceso y si no tenemos quién nos revise nuestras cuentas en el Gobierno Regional tampoco podremos avanzar más adelante".
Si bien los directivos del organismo han recibido muestras de apoyo y solidaridad de distintos actores, uno de los que inició gestiones para revertir esta situación fue el diputado por Chiloé y Palena, Alejandro Santana (RN).
En este sentido, el parlamentario remitió por intermedio de la Cámara de Diputados un oficio al subsecretario de Desarrollo de Desarrollo Regional, Ricardo Cifuentes, para regularizar la situación de la transferencia para ejecución de la restauración de las iglesias de Dalcahue y Chelín.
"Oficiamos a la Subdere para que este problema se solucione y por lo que he averiguado, no se trata de un problema de platas sino que de un trámite administrativo que está pendiente", mencionó el militante de Renovación Nacional, añadiendo que "lamentablemente por este tema se quedaron sin recursos, con el riesgo inminente que se paralicen las obras".
Quien también se sumará a las gestiones para intentar impedir que los trabajos en la iglesia se paralicen es el alcalde de Dalcahue, Juan Alberto Pérez (RN), para quien este tema "es preocupante".
"Aparentemente esto ocurrió por el cambio de Gobierno y no se ha producido el flujo de dinero, pero el compromiso está", puntualizó el jefe comunal, agregando que "hay que pensar que el tema se va a solucionar y que el Gobierno Regional va a poner el énfasis en la Dirección de Presupuesto para que así ocurra".
Junto con ello, expresó que "nosotros estaremos haciendo las gestiones para que la paralización de las obras no ocurra y si ocurre que el tiempo de detención sea el menor posible".
Recursos del programa de Puesta en Valor del Patrimonio de la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo, Subdere, fueron aprobados para la ejecución de ambos proyectos. Para cada uno de los templos se estableció un monto cercano a los mil millones de pesos.