Ana María Aceitón L.
Enfatizando que la variable financiera ha sido el factor más mencionado, influyente y predominante en el marco de la discusión sobre el futuro de la educación superior, el abogado Andrés Bernasconi entregó hace unos días sus conceptos en el auditorio de la Universidad de Los Lagos (Ulagos), en la inauguración del año académico de dicha casa de estudios.
A juicio del profesional, se han dejado de lado dos elementos importantísimos: la regulación y la acción, "los que han quedado postergados por el instrumento político del financiamiento".
Este planteamiento fue parte de la clase magistral denominada "Políticas Públicas en Educación Superior", en la cual sostuvo que los tres elementos deben ser conjugados, resguardados y exigidos con el mismo ímpetu, "ya que sin resultados en una de las áreas, el objetivo final no se logrará", enfatizó.
El académico es abogado y licenciado en Derecho de la Universidad Católica, y llegó hasta Osorno hace unos días para exponer su perspectiva acerca de un tema que está en boga a nivel país y que cruza las esferas políticas y sociales.
En su clase magistral destacó la importancia de buscar un equilibrio respecto a las variables que influyen en la educación pública de calidad; acción, regulación y financiamiento.
Bernasconi ha profundizado en la investigación sociológico de la educación superior y más específicamente en el estudio de la universidad como organización, la gestión de las universidades y el desarrollo de la profesión académica.
En su exposición, de aproximadamente una hora de duración, hizo un breve resumen respecto a las necesidades y problemas conceptuales que han desencadenado los conflictos a nivel educacional y explicó algunas de las medidas que han sido implementadas en los últimos tres años.
Se refirió al fracaso de las medidas de control que se han propuesto, como la superintendencia de la educación o acciones como la capacitación a los profesores y explicó que "deben ser abordadas con la misma relevancia y transparencia como se ha hecho en el ámbito financiero y las medidas ya aprobadas de rebajas a los créditos estatales".
En este punto, Óscar Garrido, rector de la Universidad de Lagos, aseguró que su mirada es optimista, ya que confía que en el actual gobierno habrá fórmulas de regulación que digan relación con las nuevas necesidades de la educación.
"Que apunten hacia el resguardo de una educación de calidad, por lo que la creación de una superintendencia es la solución, pero apuntando a fines del resguardo de algunos puntos, como es el proceso de acreditación y la educación como un derecho ciudadano", dijo el rector.
A juicio de Garrido, las nuevas políticas deben apuntar directamente a las universidades estatales que están muy involucradas, "porque deben comenzar a tener derechos, aunque también nuevos deberes".
Entre las responsabilidades que deberían asumir las instituciones, Garrido rescata la vinculación con la comunidad no sólo como un servicio, sino también como una institución que entrega profesionales capacitados y con un campo laboral asegurado.
Bernasconi hizo un resumen de los proyectos de ley que han sido anunciados, aprobados y los que aún están pendientes desde 2011.
Entre los aprobados sólo figuran las rebajas a los créditos universitarios Corfo y CAE, la ley de reprogramación de deudores de la educación superior y las becas a los estudiantes de pedagogía.
Mientras que en los que han sido suspendidos está la superintendencia de educación, el sistema único de financiamiento y el nuevo sistema de acreditación para la educación superior.
Entre los proyectos de ley que han sido presentados y no suspendidos está la creación del Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología. Para Garrido, el trabajo pendiente es a largo plazo, aunque según señala, hoy existen más expectativas de cambios profundos. "Sin lugar a dudas el trabajo científico en las universidades estatales está pendiente y es uno de los deberes que se tiene con el país", indicó.
El rector de la casa de estudios estatal está expectante a los cambios que traerá este año escolar y espera que las medidas que se tomen sean acordes a las necesidades que se han planteado y que han causado más de alguna diferencia en el llamado "conflicto estudiantil".
Para la institución, el desafío tiene que ver con " cumplir un rol en la agenda que ha fijado el Gobierno, que está orientado a una reivindicación de la misión que tiene el Estado en las universidades", planteó Garrido.
Por su parte, Andrés Bernasconi sostuvo que la discusión debe girar ahora en torno a una conjugación de los temas pendientes y aclarar los conceptos básicos de entendimiento, ya que hablar de una educación pública de calidad puede abordar diferentes perspectivas para los actores involucrados en la discusión.
Acción
y regulación son las variables que han sido postergadas por el Estado, según Andrés Bernasconi.
"Sin lugar a dudas el trabajo científico en las universidades estatales está pendiente y es uno de los deberes que se tiene con el país".
Óscar Garrido
Universidad de Los Lagos