El enfrentamiento ideológico en este tema asegura una larga polémica respecto del futuro sectorial.
El ministro Eyzaguirre -en una entrevista televisiva- entregó las primeras señales por donde pasarán estas transformaciones, como el fin al lucro, al copago y la selección de alumnos.
Visiones muy distintas están comenzando a quedar en evidencia en el tema educacional. Se trata de cuestiones de fondo que aseguran una larga polémica. El debate por los cambios en la educación recién comienza, como para adelantar proyectos definitivos desde el Gobierno, pero ya existe cierta inquietud, sobre todo después de las declaraciones del ministro Nicolás Eyzaguirre, quien adelantó que el primer paquete de medidas sería enviado antes del 21 de mayo.
Eyzaguirre -en una entrevista televisiva- entregó las primeras señales por donde pasarán estas transformaciones, como el fin al lucro, al copago y la selección de alumnos, aunque no ahondó en las medidas concretas. Esto puso en alerta, sobre todo, a organizaciones o personas naturales que actúan de sostenedores.
El tema de las universidades, se da por descontado que seguirá en largas conversaciones, pero en algún momento el Gobierno explicará las medidas del fin al lucro y aquellos planteles que comenzarán a aplicar este concepto, aunque las estatales quieren que estos cambios empiecen por sus organizaciones. Sin embargo, el ministro adelantó: "para que tengan financiamiento público, deben tener al menos un 20% de la matrícula en estudiantes que vengan del primer o segundo quintil".
Sin embargo, el tema más complejo está en la educación básica y media. Aparte del fortalecimiento al sistema público, a través de la desmunicipalización, el secretario de Estado espera que la "gente vuelva a confiar en la enseñanza del Estado".
Terminar con el copago, aquellos recursos que entrega el Estado por alumno matriculado en colegios subvencionados, significará que estos establecimientos tengan que redefinir sus objetivos, lo que sin duda, impactará a las familias que eligieron que sus hijos tengan otra opción de enseñanza.
Las palabras del ministro no quedaron en el aire y el propio cardenal Ricardo Ezzati contestó que "la gratuidad (en la educación) puede aparecer como una cosa excelente, pero eso conduce a que el Estado sea dueño de la educación". El debate recién comienza y distintas visiones ideológicas están en colisión.