"Tenemos mucho que mostrar. Sin embargo, nuestra identidad y conciencia turística aún son débiles".
Durante mucho tiempo, Osorno ha buscado posicionarse como un polo de atracción turística en la zona sur. Su ubicación estratégica a pocos kilómetros de Villa La Angostura y Bariloche, se conjuga con atractivos naturales que combinan mar, campo y bosque nativo. Podemos visitar localidades y conocer la magia de su pasado o la abundancia de su producción actual a cortas distancias, ofreciendo circuitos altamente atractivos para quienes buscan un turismo sustentable, único y memorable.
La infraestructura turística de nuestra ciudad también ha mejorado, con propuestas gastronómicas y una creciente oferta de alojamientos que permiten elegir dónde dormir de acuerdo con las actividades que se desarrollarán durante la visita y del presupuesto que se maneja.
Tenemos mucho que contar y mostrar. Sin embargo, nuestra identidad y conciencia turísticas son aún débiles . Y sin ello, no lograremos convertirnos en verdadero destino de turismo.
Cuando un turista elige el lugar que visitará, busca algo más que productos y servicios. Quiere vivenciar una experiencia grata y recordarla. Y si esta última es positiva, la contará a otros, recomendándola. Si logramos que el visitante haga eso, podemos decir que somos un destino turístico. Porque invitamos, acogemos, educamos, transmitimos nuestra cultura, promovemos nuestros atractivos y potenciamos la economía local beneficiando a todos quienes viven en el territorio, para continuar enriqueciendo las actividades que el turista valora y por las que está felizmente dispuesto a pagar. Pero, ¿cómo hacemos para que este engranaje funcione y que cada uno de nosotros pueda aportar desde el papel que desempeña diariamente?
Es posible apoyar la promoción de nuestro destino, asumiendo que cada uno de nosotros es turismo. Soy el principal promotor. Un embajador de lo que es la ciudad, de lo que ofrece la localidad y la comuna donde vivo. El segundo paso es educarse para poder educar. O sea, informarme de la identidad de mi territorio. Hay un ejercicio que funciona muy bien para lograr esto. Dése un momento de una tarde de este verano que nos queda, y mire la ciudad donde reside como si fuera la primera vez que la visita. ¿Si fuera un turista qué le gustaría conocer? ¿Qué se preguntaría? Verá que surgirán inquietudes.
Haga el recorrido por los lugares que incluyó en este ejercicio. Verá que logró no sólo aprender sobre el turismo de nuestra provincia, sino también, que está preparado para que la próxima vez que una persona que busque cosas por hacer en Osorno, le pregunte alguna recomendación, tenga la respuesta precisa a esa consulta. Será un promotor del turismo de nuestra zona.
Vicerrector Universidad Tecnológica de Chile, Inacap